Las setas y Júpiter, temas del XV Premio Holanda para jóvenes científicos

José Antonio Muñoz Sánchez, de diecinueve años, gran aficionado a la búsqueda de setas, y Jorge Casares Velázquez, de dieciocho años, un enamorado de la astronomía, han obtenido los dos primeros premios de la 15ª edición del Premio Holanda, para jóvenes científicos, dotados con 250.000 pesetas cada uno. Los dos acceden así a la final europea del premio, que tendrá lugar el próximo mes de mayo en Copenhague.

El trabajo ahora premiado a José Antonio Muñoz, que vive en Bilbao y estudia Formación Profesional, rama de electrónica, es la segunda parte de un estudio micológico de la provincia ...

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José Antonio Muñoz Sánchez, de diecinueve años, gran aficionado a la búsqueda de setas, y Jorge Casares Velázquez, de dieciocho años, un enamorado de la astronomía, han obtenido los dos primeros premios de la 15ª edición del Premio Holanda, para jóvenes científicos, dotados con 250.000 pesetas cada uno. Los dos acceden así a la final europea del premio, que tendrá lugar el próximo mes de mayo en Copenhague.

El trabajo ahora premiado a José Antonio Muñoz, que vive en Bilbao y estudia Formación Profesional, rama de electrónica, es la segunda parte de un estudio micológico de la provincia de Vizcaya, con una colección tan rica de hongos superiores que ha suscitado el interés del director del Jardín Botánico de Madrid por incluirla en los fondos del Botánico.La primera parte de este trabajo mereció un segundo premio en la anterior edición del concurso.

A Jorge Casares, que vive en Barcelona, el premio le ha sido concedido también por una ampliación de un trabajo presentado el año pasado, sobre el movimiento de los satélites del planeta Júpiter. El ahora premiado es estudiante de primer curso de Físicas y miembro de la Agrupación Astronómica de Sabadell.

En esta edición, el jurado, formado por científicos y catedráticos españoles de distintas ramas de la ciencia, se vio sorprendido por la altura de algunos de los trabajos finalistas y por la soltura y la pasión con que los concursantes los defendieron ante los miembros del jurado.

Como señaló Carmina Virgili, secretaria de Estado para Universidades e Investigación, y presidente del jurado, el tesón y el rigor científico demostrados por estos jóvenes llevó a los miembros del jurado a plantearse el tema de la capacidad científica de los españoles. "Cuando nos contaban las dificultades que habían tenido para hacerse con libros, para investigar en bibliotecas o simplemente para acceder a sus propios profesores, nos dábamos cuenta, una vez más, de que lo importante para la investigación científica es un ambiente sociocultural adecuado y unas estructuras adecuadas".

Un trabajo de física teórica sobre la contracción de Lorentz, que mereció un segundo premio, fue especialmente alabado por miembros del jurado, que se sintieron impresionados por el conocimiento que de la teoría de la relatividad demostraba su autor, José Luis Fernández Barbón, de dieciséis años.

El catedrático de bioquímica Julio Rodríguez Villanueva, que actuó de portavoz del jurado, señalaba también el mérito del otro segundo premio, un trabajo de cuatrocientas páginas de extensión, excelentemente presentado, realizado por Alfonso Bullón Mendoza, sobre el tema de una expedición carlista que llegó hasta Gibraltar.

De los 64 trabajos presentados este año al Premio Holanda, que patrocinan la empresa Plillips y la cadena de radiodifusión SER, los más numerosos se referían a la física teórica y a los temas de ecología y medio ambiente.

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