Más de 450 reclusos de la cárcel Modelo esperan juicio desde hace más de un año

Cuatro días después de que once reclusos se fugaran de la cárcel Modelo de Barcelona el Fiscal de Vigilancia Penitenciaria ha remitido un informe a la Fiscalía, explicando la situación del centro. Para Carlos Jiménez Villarejo gran parte del mal de la Modelo radica en el hecho de que existen un gran número de presos preventivos en espera de juicio oral. Según este documento, más de 450 reclusos esperan juicio desde hace más de un año, llegando a darse el caso de un preso que espera desde hace cinco años.En el informe del fiscal Carlos Jiménez Villarejo se asegura que en la cárcel Modelo de Bar...

Cuatro días después de que once reclusos se fugaran de la cárcel Modelo de Barcelona el Fiscal de Vigilancia Penitenciaria ha remitido un informe a la Fiscalía, explicando la situación del centro. Para Carlos Jiménez Villarejo gran parte del mal de la Modelo radica en el hecho de que existen un gran número de presos preventivos en espera de juicio oral. Según este documento, más de 450 reclusos esperan juicio desde hace más de un año, llegando a darse el caso de un preso que espera desde hace cinco años.En el informe del fiscal Carlos Jiménez Villarejo se asegura que en la cárcel Modelo de Barcelona se encuentran recluidos 1.500 presos preventivos. El 25% de estos preventivos, unos 350, llevan más de un año esperando la celebración del juicio oral. Otros 111 esperan hace más de dos años.

Carlos Jiménez Villarejo ha explicado que uno de los reclusos fugados hace pocos días, por el túnel de la Modelo, esperaba desde hace tres años la celebración del juicio, mientras que otros dos huidos llevaban dos años esperando el juicio.

Según el fiscal, sólo teniendo en cuenta este dato se puede comprender como algunos presos calificados como "de confianza", decidieron evadirse de la cárcel. Para el fiscal, causa de este gran número de preventivos es que se suspenden muchos juicios orales. Pero insiste en que los culpables son, sobre todo, los propios abogados, que crónicamente retrasan las causas en sus despachos, sin que las secretarías de las salas de justicia ejerzan los controles pertinentes.