La Xunta adopta iniciativas en apoyo de los emigrantes
Los emigrantes tendrán derecho a colaborar y compartir la vida social y cultural del pueblo gallego", según el proyecto de ley de reconocimiento de la galleguidad de origen de las comunidades en el extranjero, que el gobierno de Galicia ha decidido remitir al parlamento autónomo en su última reunión. La Xunta de Galicia decidió solicitar, por otra parte, al Gobierno la concesión de ayudas del Fondo Nacional de Asistencia Social a un cierto número de emigrantes gallegos -por lo general, ancianos- que padecen situaciones de indigencia absoluta en varios países de Latinoamérica.
La ley...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Los emigrantes tendrán derecho a colaborar y compartir la vida social y cultural del pueblo gallego", según el proyecto de ley de reconocimiento de la galleguidad de origen de las comunidades en el extranjero, que el gobierno de Galicia ha decidido remitir al parlamento autónomo en su última reunión. La Xunta de Galicia decidió solicitar, por otra parte, al Gobierno la concesión de ayudas del Fondo Nacional de Asistencia Social a un cierto número de emigrantes gallegos -por lo general, ancianos- que padecen situaciones de indigencia absoluta en varios países de Latinoamérica.
La ley citada, que por expresa disposición estatutaria no puede conceder en ningún caso derechos políticos a sus beneficiarios, afectará aproximadamente a unos 250.000 emigrantes gallegos agrupados en centros, asociaciones y otras entidades de carácter fundamentalmente cultural y asistencial distribuidas entre varios países de Latinoamérica, y Europa.
Aunque el censo de comunidades emigrantes elaborado por la propia Xunta abarca únicamente 64 centros, con un total de 230.000 socios, se calcula en cerca de trescientos el número real de asociaciones gallegas existentes en el mundo. Algunas de ellas, como el Centro Gallego de Buenos Aires o la Hermandad Gallega de Caracas, han llegado a transformarse en poderosos núcleos de influencia política y social dentro de los países donde están asentadas.