1.082 muertos en el terremoto de Yemen del Norte
El balance de víctimas del terremoto que azotó el lunes a mediodía a la provincia de Dhamar, a un centenar de kilómetros al sur de Sanaa, asciende a 1.082 muertos y 1.140 heridos, según el Ministerio del Interior de Yemen del Norte. Las localidades afectadas han sido 136 y quince han sido destruidas.
Cuatro sacudidas telúricas sucesivas -la más larga, de cuarenta segundos de duración-, cuya magnitud osciló entre cuatro y seis puntos en la escala de Richter, que cuenta con nueve niveles, fueron en total registradas.
El jefe del Estado de Yemen del Norte, presidente Ali Abdalla...
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El balance de víctimas del terremoto que azotó el lunes a mediodía a la provincia de Dhamar, a un centenar de kilómetros al sur de Sanaa, asciende a 1.082 muertos y 1.140 heridos, según el Ministerio del Interior de Yemen del Norte. Las localidades afectadas han sido 136 y quince han sido destruidas.
Cuatro sacudidas telúricas sucesivas -la más larga, de cuarenta segundos de duración-, cuya magnitud osciló entre cuatro y seis puntos en la escala de Richter, que cuenta con nueve niveles, fueron en total registradas.
El jefe del Estado de Yemen del Norte, presidente Ali Abdallah Saleh, se desplazó el martes hasta el lugar de la tragedia junto con varios responsables gubernamentales. Tras efectuar una gira por las localidades dañadas y visitar a los heridos en el hospital de Dhamar, el presidente lanzó un llamamiento a la población pidiéndole que preste ayuda a los socorristas. La radio estatal transmitía, por su parte, mensajes pidiendo a los donantes desinteresados de sangre que acudan a los hospitales.
La ayuda material empieza a llegar a Yemen del Norte principalmente de los dos países fronterizos, Yemen del Sur y Arabia Saudí, y, en menor medida, de Qatar y Kuwait, mientras Irak, Libia y Jordania han prometido su colaboración. A pesar de todo, los socorristas sólo pueden actuar con lentitud a causa del carácter montañoso de la región, del corte de numerosas carreteras y de la probabilidad de que se produzcan nuevas sacudidas telúricas.