El nuevo Gobierno

Felipe González se convierte en presidente del Gobierno tras prometer ante el Rey que cumplirá las obligaciones de su cargo

Felipe González se convirtió ayer en el primer presidente le Gobierno socialista en España desde hace casi medio siglo, al prometer, poco después de las diez de la mañana, "por su conciencia y honor, cumplir fielmente las obligaciones del cargo, con lealtad al Rey, y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros". El acto se realizó en una breve ceremonia que tuvo lugar en el palacio de la Zarzuela, ante el Rey. Ayer mismo, el presidente González comenzó los preparativos de la que será su g...

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Felipe González se convirtió ayer en el primer presidente le Gobierno socialista en España desde hace casi medio siglo, al prometer, poco después de las diez de la mañana, "por su conciencia y honor, cumplir fielmente las obligaciones del cargo, con lealtad al Rey, y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros". El acto se realizó en una breve ceremonia que tuvo lugar en el palacio de la Zarzuela, ante el Rey. Ayer mismo, el presidente González comenzó los preparativos de la que será su gestión. Por un solo día, España tuvo ayer un presidente socialista del Gobierno y unos ministros centristas, aún en funciones, hasta que hoy tomen posesión sus sucesores.

A la toma de posesión asistieron también el presidente del Gobierno saliente, los presidentes del Congreso y del Senado y los presidentes del Tribunal Constitucional, del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder judicial, González prometió el cargo, de pie y poniendo la mano sobre los evangelios y ante un crucifijo, el mismo empleado en la ceremonia del juramento de Adolfo Suárez y Leopoldo Calvo Sotelo. En el acto estuvo tambíén presente el ministro de Justicia saliente, Pio Cabanillas, como noaria mayor del Reino. El nuevo presidente permaneció después en la Zarzuela por espacio de casi una hora, conversando con el Rey, y no hizo declaraciones a los periodistas que asistieron a la ceremonia.Felipe González se dirigió posteriormente a la Moncloa, donde almorzó en privado con su antecesor, Calvo Sotelo, y donde reside ya desde ayer mismo, junto con su familia, que abandonó la habitual residencia en la calle Pez Volador. Paralelamente, los colaboradores más estrechos del nuevo presidente, Julio Feo, Eduardo Sotillos y Roberto Dorado, secretario, portavoz y director del gabinete presidencial, respectivamente, ultimaban el traspaso de poderes con sus antecesores.

El rodaje del nuevo gabinete, que hoy prestará juramento en la Zarzuela, comenzará probablemente mañana, con un breve encuentro informal de los ministros con el presidente González y el vicepresidente Guerra, en lo que se considera una preparación del Consejo de Ministros del próximo martes, primero que celebrará el nuevo equipo.

En medios socialistas se insiste en que los poderes de los ministros quedarán bastante recortados, ya que verán limitado el acceso directo al jefe del Ejecutivo, y tampoco contarán con los fondos de gastos reservados, con los que sus antecesores podían efectuar contrataciones libres de asesores y similares, y que en tantos casos se utilizaron como fondos de reptiles.

Se desconoce, por el momento la incidencia que tendrá el equipo de asesores de Presidencia sobre el funcionamiento del Gobierno, pero en todo caso, parece asegura da la importancia de este equipo El vicepresidente Alfonso Guerra aseguró ayer que el plantel de asesores presidenciales, que él dirigirá personalmente ayudado por Roberto Dorado y, por el economista Francisco Fernández Marugán, contará con un importante número de personas, en torno al centenar. El equipo de los cien se dividirá en siete departamentos, que no se corresponderán con el número y la estructura de los ministerios. Estas áreas, según Guerra, serán la económica, institucional, internacional, socio-laboral, educación y cultura y seguridad ciudadana. El propio Fernández Marugán, subdirector de todo el equipo bajo las órdenes, de Dorado, se encargará del departamento económico, mientras que el diplomático,José Antonio Yañez tendrá a su cargo el área internacional y Mariano Pérez Galán el de educación, desconociéndose los nombres de los responsables de los restantes departamentos.

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Estos responsables de la asesoría presidencial tendrán nivel de director general y contactarán directamente con los directores de gabinete de los ministerios, y no con los ministros. Contra lo que inicialmente se planeaba, los economistas Joaquín Leguína Y José Luis Sampedro no estarán presentes en el equipo, aunque sí figurará la experta en cuestiones internacionales Elena Flores.

Guerra, máximo supervisor de todo este equipo presidencial, nombrará jefe de gabinete a su actual secretario, el matemático Rafael Delgado, e instalará su despacho en el edificio de semillas selectas, anejo al Palacio de la Moncloa. El vicepresidente reconoce que el complejo monclovita "no es funcional", pero, por el momento, no habrá traslados a otras dependencias.

El vicepresidente del Gobierno asistió ayer a la reunión del Grupo Parlamentario Socialista, que aprobó el nombramiento de Javier Saenz Cosculluela como su presidente, de Pedro Silva como portavoz y de Eduardo Martín Doval como secretario general. El propio Guerra y el ministro de Administraciones Públicas, Javier Moscoso, que no es miembro del PSOE, fueron los únicos diputados miembros del Gobierno que asistieron a la reunión de los parlamentarios socialistas. El resto del equipo gubernamental permaneció en sus despachos, o celebró reuniones sectoriales, preparando el miniconsejo de mañana sábado, preparatorio a su vez del Consejo de Ministros del martes.

En este consejo se aprobarán probablemente los nombramientos de los nuevos secretarios de Estado, subsecretarios y secretarios generales técnicos, además de los de director general de RTVE y de la agencia EFE. Los directores generales, subdirectores y demás altos cargos podrían quedar para consejos posteriores. También podrían dictarse el martes algunas medidas económicas, como la autorización de una emisión de deuda pública. Otros temas que se suponen de pronta aprobación, como la ley de Incompatibilidades o el Estatuto de la Función Pública, pilares de la reforma administrativa, deberán estar aprobados antes de enero. Todo ello hace suponer que, al menos en la primera semana, pueden celebrarse más de una reunión del Gabinete.

Preguntado si le gusta el Gobierno del que es vicepresidente, Guerra, sonriendo, se limitó a responder: "Naturalmente", insistiendo en que tan sólo razones personales le llevaron a rechazar inicialmente un puesto en el Gabinete. También declaró que el Consejo de Ministros tratará de evitar ser el que nombre a los presidentes y directores de las empresas públicas, prefiriéndose que sean los responsables de cada departamento ministerial quienes lo hagan. Otras fuentes gubernamentales dijeron que existe la intención de cesar a corto plazo a los presidentes de, al menos, tres de estas empresas, como Iberia, Renfe y Telefónica. En esta última tomaba posesión hace dos días, como consejero, el ex capitán general de Canarias, teniente general González del Yerro.

Fiesta de la Constitución

El presidente del Congreso de los Diputados, Gregorio Peces-Barba, ha decidido dar un relieve especial a la jornada del próximo lunes, día 6, aniversario de la Constitución. Más de 600 personas serán convocadas en el Palacio de las Cortes, a mediodía del mismo lunes, para celebrar la efemérides. Colegiales, amas de casa, soldados, asociaciones de vecinos y otras organizaciones populares estarán ese día con ministros, jefes del Ejército, cardenales, diplomáticos y parlamentarios en el Congreso de los Diputados.

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