Fuertes subidas en las tres bolsas periféricas

El inicio de la semana ha sido acogido por los tres mercados operantes, en Madrid era fiesta local, con unas subidas notablemente aparatosas que se centraban especialmente en los valores del grupo eléctrico y en Telefónica, contagiándose del aparente optimismo de los inversores casi todos los valores que se negociaron. La cruz de la moneda la aportó el grupo químico, donde el pago de dividendo que realizó Petróleos, le afectaba negativamente.En la búsqueda de justificaciones a este esperanzador comportamiento del mercado se citaron extremos tales como el reciente apoyo que ha prestado la Admin...

El inicio de la semana ha sido acogido por los tres mercados operantes, en Madrid era fiesta local, con unas subidas notablemente aparatosas que se centraban especialmente en los valores del grupo eléctrico y en Telefónica, contagiándose del aparente optimismo de los inversores casi todos los valores que se negociaron. La cruz de la moneda la aportó el grupo químico, donde el pago de dividendo que realizó Petróleos, le afectaba negativamente.En la búsqueda de justificaciones a este esperanzador comportamiento del mercado se citaron extremos tales como el reciente apoyo que ha prestado la Administración francesa a las autoridades españolas en la lucha contraterrorista, con la detención de varios presuntos dirigentes etarras al otro lado de los Pirineos, o el moderado incremento que experimetó el Indice de Precios al Consumo (IPC) correspondiente al mes de septiembre.

Sin embargo, la realidad parece ser bastante más sencilla. Con la festividad de la plaza madrileña, una parte importante de las potenciales órdenes de venta se quedaron sin cumplir al tener centralizados en esta capital sus servicios de valores una buena parte de las entidades de crédito que operan en nuestro país. A la vista de este hecho, los inversores a corto plazo de los mercados autóctonos decidieron aproximar, e incluso superar los precios de los títulos que ayer se negociaron en sus respectivas bolsas.

El objeto que se perseguía era doble: por un lado, se generaba un ajuste en los precios, y, por otro, se producían unas plusvalías susceptibles de ser realizadas en el mercado de valores de Madrid a lo largo de las próximas reuniones. El trasfondo real de estas furiosas compras de los especialistas de Barcelona, Bilbao y Valencia sólo podrá conocerse tras el reinicio de las operaciones -en Madrid, mercado donde se realiza el 70% de las operaciones bursátiles españolas. Si hoy mismo comienzan a funcionar las ventas por arbitraje, es decir, las órdenes que llegan de otras plazas, la hipótesis de que se estaban buscando unos beneficios rápidos, cobrará cuerpo. Si, por el contrario, se mantiene una situación similar a la de las jornadas precedentes, habrá que reconocer que únicamente se pretendía realizar una armonización de los precios de las acciones más representativas.

En cualquier caso, ha vuelto a sorprender el empuje de Telefónica que, con sus 3,25 enteros de mejora en Barcelona, y sólo es por poner un ejemplo, contribuía de forma destacada a conseguir que el índice general de este mercado reflejase un avance de 1,82 puntos. En cualquier caso, la diferencia de precios que se plantea con relación a Madrid es ya importante -tres enteros en el caso del mercado bilbaíno-, y esta circunstancia ha dado lugar a que vuelvan a dispararse los rumores sobre la posibilidad de que los responsables de la compañía estén buscando potenciar el incremento en la cotización de sus títulos, para plantear un desdoble de capital. En algunos sectores se apuesta porque la estrategia de Telefóníca corre paralela a la de las grandes compañías eléctricas.

En cuanto a los bancos, se mantuvo la moderación de la mayor parte de los integrantes del sector, y a nivel de comentarios destacaban los rumores sobre la posibilidad de que el Vizcaya abandone su estrategia de no beligerancia, y se decida a hacer valer el mayor importe de sus dividendos para profundizar sus diferencias.