EL debate de la Ley de Armonización Autonómica

Finaliza sin acuerdos concretos la 'cumbre' anti-LOAPA celebrada en Barcelona

La reunión del frente parlamentario anti-LOAPA celebrada ayer en Barcelona entre dirigentes de partidos nacionalistas terminó sin acuerdo respecto al carácter del recurso de inconstitucionalidad a presentar contra la polémica ley orgánica de Armonización del Proceso Autonómico. El máximo de acuerdo a que se llegó fue "coordinar iniciativas de acciones, tanto de carácter político como jurídico, encaminadas a impedir que prospere la LOAPA".

El punto fundamental de litigio radica en si el recurso debe ser previo o no. Salvo el Partido Socialista de Andalucía y Euskadiko Ezquerrá, todos los...

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La reunión del frente parlamentario anti-LOAPA celebrada ayer en Barcelona entre dirigentes de partidos nacionalistas terminó sin acuerdo respecto al carácter del recurso de inconstitucionalidad a presentar contra la polémica ley orgánica de Armonización del Proceso Autonómico. El máximo de acuerdo a que se llegó fue "coordinar iniciativas de acciones, tanto de carácter político como jurídico, encaminadas a impedir que prospere la LOAPA".

El punto fundamental de litigio radica en si el recurso debe ser previo o no. Salvo el Partido Socialista de Andalucía y Euskadiko Ezquerrá, todos los grupos representados se mostraron partidarios de un pacto legislativo con UCD, pero, en palabras de Xabier Arzallus, con la condición "necesaria pero no suficiente" de la retirada de la LOAPA.Detrás de la discusión, aparentemente bizantina -ya que el recurso previo no impide la presentación del recurso de inconstitucionalidad, ni siquiera en el caso de fallo en contra- se hallan cuestiones de índole electoral. Convergencia i Unió y el PNV parecen temer una sentencia contraria a sus posturas por parte del tribunal, que según y como vaya la convocatoria de elecciones podría producirse en plena campaña. El PNV desea que el recurso sea sólo de inconstitucionalidad, aduciendo para ello la necesidad de estudiar con detalle el texto de la ley. Convergencia i Unió duda oficialmente, si bien parece inclinarse por la postura del PNV. El resto de los grupos, con el PCE a la cabeza, prefiere el recurso previo. La situación más delicada es la de Convergencia i Unió, que puede verse obligada a apoyar el recurso previo en el Parlamento catalán, lo que le dejaría sin argumentos para hacer lo contrario en el Congreso de los Diputados.

En la reunión estuvieron representados Convergencia i Uniò, Esquerrá Republicana de Cataluña, Euskadiko Ezkerra, Partido Comunista de España, Partido Nacionalista Vasco, Partido Socialista de Andalucía y Partido Socialista Unificado de Cataluña. Todos ellos se mostraron partidarios de agotar la legislatura presente, salvo los representantes del PSA.

Para presentar recurso previo de inconstitucionalidad son necesarios un mínimo de cincuenta diputados, mientras que los grupos del frente anti-LOAPA suman en estos momentos 48, contando con los posibles firmantes del Grupo Mixto. Sin embargo, Santiago Carrillo manifestó ayer, en el curso de la conferencia de Prensa que siguió a la reunión, que las firmas no serían ningún problema, a tenor de las gestiones ya realizadas, si bien no hay acuerdo definitivo alguno.

En general los asistentes manifestaron su voluntad de que el Senado modifique la ley en algún sentido, ya que ello aplazaría para septiembre la discusión de la misma en su vuelta al Congreso. Xabier Arzallus afirmó que los senadores deberían tener en cuenta las palabras de Felipe González cuando dice que es la ley más importante desde la Constitución, y no dejarla pasar sin análisis.

No hay acuerdo con UCD

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Respecto a la posibilidad de un pacto legislativo con UCD por parte de las fuerzas presentes, tema que se especulaba que sería tratado en la reunión, los asistentes fueron tajantes al afirmar que no se había discutido, "ni siquiera mencionado", en palabras de Arzallus. Sin embargo, los distintos grupos mostraron su postura: salvo el PSA y Euskadiko Ezkerra, todos se mostraron partidarios de un posible acuerdo, con una condición, definida por Arzallus como "necesaria pero no suficiente": la retirada de la LOAPA. Lertxundi afirmó, por su parte, que si Calvo Sotelo dependiera de un solo voto, Bandrés no se lo daría.En la reunión se decidió también invitar al PSOE y a UCD a futuras reuniones encaminadas a rectificar "el camino emprendido por la LOAPA", así como celebrar una próxima reunión entre los asistentes en Madrid.

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