El Consorcio de Seguros adquirió 6.730 millones de pesetas en bonos y certificados de la banca privada

El Consorcio de Compensación de Seguros, organismo dependiente del Ministerio de Hacienda, destinó en 1981 más del 70% de sus inversiones (6.730 millones de pesetas) a adquisición de renta fija y certificados de depósito de la banca privada, mientras que sólo un 28% de los citados recursos (1.600 millones de pesetas) fueron dedicados a la adquisición de efectos públicos.

Las inversiones presupuestadas para el citado consorcio en 1981, que ascendían a 6.515 millones de pesetas, fueron posteriormente aumentadas en 1.850 millones. Según una documentación remitida por Hacienda al Congreso, ...

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El Consorcio de Compensación de Seguros, organismo dependiente del Ministerio de Hacienda, destinó en 1981 más del 70% de sus inversiones (6.730 millones de pesetas) a adquisición de renta fija y certificados de depósito de la banca privada, mientras que sólo un 28% de los citados recursos (1.600 millones de pesetas) fueron dedicados a la adquisición de efectos públicos.

Las inversiones presupuestadas para el citado consorcio en 1981, que ascendían a 6.515 millones de pesetas, fueron posteriormente aumentadas en 1.850 millones. Según una documentación remitida por Hacienda al Congreso, a solicitud del Grupo Parlamentario del PSOE, el Consorcio de Compensación de Seguros "viene obligado a constituir y a invertir importantes reservas técnicas debido a la variada gama de riesgos que cubre y a la naturaleza extraordinaria de los mismos".En medios parlamentarios socialistas han causado sorpresa las fuertes inversiones del Consorcio de Compensación de Seguros en bonos y certificados de depósito de la banca privada, y que incluso se hayan adquirido títulos a algunas entidades que han pasado en los últimos tiempos por el Fondo de Garantía de Depósitos (el denominado hospital de bancos).

La documentación de Hacienda asegura que la inversión de estas reservas técnicas se efectúa atendiendo a los clásicos principios de seguridad, rentabilidad y liquidez.

La seguridad se busca, fundamentalmente, "por la selección de los valores objeto de inversión y por la dispersión de las inversiones, que no superan el 10% de cada emisión ni, entre todas las inversiones de cada entidad, el 10% de los recursos propios de la misma".

Las inversiones se negocian en condiciones de mercado con el objetivo de lograr la mayor rentabilidad (en 1981 se lograron rentabilidades brutas en torno al 15%, a deducir retenciones).

Respecto a la liquidez, el documento de Hacienda afirma que es "imprescindible debido a la importancia de las indemnizaciones que ha de pagar el organismo (6.049.999.349 pesetas, durante 1981, por todos los conceptos cubiertos por el mismo), que no son periódicas ni regulares; ello ha aconsejado que se tienda a que una tercera parte de la cartera de valores esté constituida por certificados de depósito, que permiten la necesaria liquidez sin merma de rentabilidad".

La cartera de efectos y valores del Consorcio de Compensación de Seguros a último día de 1981, según la citada documentación, se distribuía de la forma siguiente:

- Efectos públicos, 43%.

- Renta fija privada, 19,82% (distribuido entre 65 sociedades).

- Certificados de depósito, 36,5% (distribuido en 46 bancos).

- Acciones, 0,68% (integrado por acciones de la Compañía Española de Seguros de Crédito y Caución, SA, y un antiguo paquete de la Compañía Telefónica Nacional de España).

Fuentes de la Administración consuItadas al respecto indican que la importante adquisición de renta fija y certificados de depósitos a la banca privada en 1981 se realizó, precisamente, para lograr la actual composición de la cartera de efectos y valores del Consorcio de Compensación de Seguros.

Este organismo autónomo no cuenta con subvenciones, y si no se invierten bien los fondos procedentes de las primas que pagan las compañías -añaden dichas fuentes- no habría dinero para hacer frente al pago de los grandes siniestros (inundaciones, incendios, catástrofes naturales).

"Creemos que los efectos públicos en la cartera del Consorcio de Compensación de Seguros debe situarse entre el 40% y el 45%.

Por ello, este año, con los nuevos pagarés del Tesoro, se adquirirán más efectos públicos para mantener los porcentajes citados.

Lo que no interesa al Consorcio de Compensación de Seguros es la renta variable, y, de hecho sólo existe, y desde hace años, una mínima parte de estos títulos en la cartera del Consorcio", precisan las fuentes de la Administración.

En 1981, dentro del reducido porcentaje dedicado por el Consorcio a adquisición de efectos públicos, se tomaron bonos del Banco de Crédito a la Construcción (400 millones, con una rentabilidad bruta del 15, 27%), del Instituto de Crédito Oficial (500 millones, con 14,25% de rentabilidad), cédulas del Banco Hipotecario de España (400 millones, con un 15% de rentabilidad) y obligaciones del Instituto Nacional de Industria (300 millones, con una rentabilidad del 15%).

En renta fija privada se adquirieron 575 millones en bonos de los bancos Urquijo, de la Pequeña y Mediana Empresa, Arabe Español y Bankinter.

De esta cantidad, 225 millones de pesetas fueron adquiridos con una rentabilidad bruta del 15%, 150 millones al 15,29% y 200 millones al 17%.

Cuarenta y un bancos privados se repartieron los 6.155 millones dedicados por el Consorcio a la adquisición de certificados de depósito con rentabilidades brutas que oscilan entre el 14,70% y el 15,29%.

Las entidades que colocaron mayor volumen de certificados al Consorcio fueron el Banco de Andalucía (583 millones), Urquijo (502 millones), Vizcaya (404 millones), Exterior de España (390 millones), Popular Industrial (350 millones), Central (304 millones) y Garriga Nogués (301 millones). También aparecen en la relación Mas Sardá, Bankunión y López Quesada.

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