Teniente de aviación, condenado por disparar contra un civil

El teniente de Aviación Luis González Berraquero ha sido condenado a un total de un año de privación de la libertad y al pago de unos tres millones de pesetas de indemnización, tras el consejo de guerra que le juzgó el pasado día 30 de junio por disparar contra el civil Diego Ruiz Torres, camarero del club de suboficiales del sector español de la base aérea de Torrejón.El suceso se produjo el 9 de mayo de 1979 y la víctima sufrió daños cerebrales irreparables. Los delitos por los que ha sido condenado el procesado han sido el de imprudencia temeraria seguida de lesiones y el de amenzas, con la...

El teniente de Aviación Luis González Berraquero ha sido condenado a un total de un año de privación de la libertad y al pago de unos tres millones de pesetas de indemnización, tras el consejo de guerra que le juzgó el pasado día 30 de junio por disparar contra el civil Diego Ruiz Torres, camarero del club de suboficiales del sector español de la base aérea de Torrejón.El suceso se produjo el 9 de mayo de 1979 y la víctima sufrió daños cerebrales irreparables. Los delitos por los que ha sido condenado el procesado han sido el de imprudencia temeraria seguida de lesiones y el de amenzas, con la concurrencia en ambos de la eximente incompleta de trastorno mental transitorio. En concepto de responsabilidad civil el procesado ha sido condenado al pago de 389.803 pesetas a favor de la residencia sanitaria de la Seguridad Social La Paz, de otras 255,973 pesetas en favor del perjudicado por los gas,tos habidos, y de dos millones y medio de pesetas en favor del mismo en concepto de indemnización. La sentencia dictada por el consejo de guerra no será firme hasta que la apruebe la autoridad judicial de la Primera Región Aérea o en su caso el Consejo Supremo de Justicia Militar, si por el ministerio fiscal se interpusiera contra la misma recurso de casación. En caso de adquirir firmeza la sentencia, el condenado deberá ser puesto en libertad, ya que ha permanecido veinticinco meses en la prisión de Alcalá de Henares y en el Hospital Psiquiátrico de Ciempozuelos. Según el tribunal médico militar de este centro, el procesado sufre una alcohofilia sistemática de una personalidad subdepresiva-sensitiva.