Cartas al director

El poder judicial

Siendo como somos un Estado liberal democrático (impuro y contradictorio, cierto, pero democrático), nos es imprescindible la existencia de un poder judicial conscientemente independiente.Si en épocas pasadas el poder judicial se hizo derivar de Dios" o de un personaje mítico superior, o de una voluntad o grupo de voluntades encaramadas a un totalitarismo, hoy la justicia debe ser la expresión de la soberanía popular, de la soberanía de toda la comunidad. Es en esta soberanía donde el poder judicial encuentra su apoyo y recibe su sanción.

En los países civilizados, la independencia judi...

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Siendo como somos un Estado liberal democrático (impuro y contradictorio, cierto, pero democrático), nos es imprescindible la existencia de un poder judicial conscientemente independiente.Si en épocas pasadas el poder judicial se hizo derivar de Dios" o de un personaje mítico superior, o de una voluntad o grupo de voluntades encaramadas a un totalitarismo, hoy la justicia debe ser la expresión de la soberanía popular, de la soberanía de toda la comunidad. Es en esta soberanía donde el poder judicial encuentra su apoyo y recibe su sanción.

En los países civilizados, la independencia judicial es uno de los postulados básicos, y en nuestra frágil democracia y en vías de desarrollo (y también de plena realización, ¿por qué no?) ha de serlo. El poder judicial independiente (con sus limitaciones en la realidad, pero también con sus posibilidades de perfeccionamiento) contribuirá a que la soberanía popular se vea reflejada también en la justicia, y una democracia con división de poderes contribuirá a que la independencia del juez asuma su pleno significado. /

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