Detenida cuando se disponía a matar a la esposa de su amante

Raquel Casero de Aragón, de treinta años de edad, y su cómplice, Francisco José Sánchez Blanco, de diecinueve, fueron detenidos a las 20.30 horas del jueves, en un descampado próximo a la calle de Arturo Soria, en el momento justo en que iban a cometer un crimen en la persona de una mujer de 55 años, cuyo nombre no fue facilitado.Funcionarios de Policía comenzaron a sospechar de esta posibilidad hace algún tiempo, con toda seguridad por denuncia de esta última mujer, y montaron un dispositivo de vigilancia en torno a la citada Raquel Casero. En el día de Ios hechos, los dos detenidos habían se...

Raquel Casero de Aragón, de treinta años de edad, y su cómplice, Francisco José Sánchez Blanco, de diecinueve, fueron detenidos a las 20.30 horas del jueves, en un descampado próximo a la calle de Arturo Soria, en el momento justo en que iban a cometer un crimen en la persona de una mujer de 55 años, cuyo nombre no fue facilitado.Funcionarios de Policía comenzaron a sospechar de esta posibilidad hace algún tiempo, con toda seguridad por denuncia de esta última mujer, y montaron un dispositivo de vigilancia en torno a la citada Raquel Casero. En el día de Ios hechos, los dos detenidos habían seguido a la víctima hasta un sanatorio ubicado en la misma calle de Arturo Soria. Al salir ésta del mismo poco después, fue abordada por aquéllos de forma violenta y conducida hacia un descampado próximo.

Francisco José Sánchez llevaba a la víctima fuertemente cogida del brazo, mientras que Raquel Casero caminaba inmediatamente detrás de ambos. Cuando Raquel, esgrimiendo un cuchillo de grandes proporciones, iba a apuñalar a la mujer por la espalda, los funcionarios, que iban siguiendo toda la operación de forma sigilosa, se abalanzaron contra ella e impidieron que se consumara el crimen.

Posteriormente, la policía informó que, al parecer, Raquel Casero mantenía relaciones con el esposo de la víctima y su intención era acabar con la vida de ésta para poder contraer matrimonio con su amante, el cual, también según la policía, estaba ajeno a lo tramado por Raquel. Francisco José colaboró con ésta por coacción.