Una revista soviética describe a Solidaridad como un nido de espías
El semanario soviético Literaturnaya Gazeta acusó ayer al sindicato polaco Solidaridad de estar mezclado en un oscuro asunto de espionaje. Hasta el momento, la Prensa moscovita se había limitado a cuestionar tan sólo, en el peor de los casos, la procedencia de los fondos de Solidaridad.Un enviado especial de Literaturnaya Gazeta, tras describir la sede en Varsovia del citado sindicato -«un edificio triste, construido a base de departamentos estancos, como si fuera un submarino»-, hace referencia al sótano del citado inmueble, que, según los periodistas, es «su lugar más secreto»....
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El semanario soviético Literaturnaya Gazeta acusó ayer al sindicato polaco Solidaridad de estar mezclado en un oscuro asunto de espionaje. Hasta el momento, la Prensa moscovita se había limitado a cuestionar tan sólo, en el peor de los casos, la procedencia de los fondos de Solidaridad.Un enviado especial de Literaturnaya Gazeta, tras describir la sede en Varsovia del citado sindicato -«un edificio triste, construido a base de departamentos estancos, como si fuera un submarino»-, hace referencia al sótano del citado inmueble, que, según los periodistas, es «su lugar más secreto».
En este sótano, afirma el semanario soviético, «fueron guardados hace tres meses los documentos robados al fiscal general de Polonia, que, posteriormente, serían enviados clandestinamente a ciertos centros antisocialistas».
El enviado especial de Literaturnaya Gazeta, I. Andronov, evita cualquier referencia al líder sindicalista Lech Walesa, y dedica abundantes ataques a Jacek Kuron, dirigente del grupo disidente KOR (Comité de Autodefensa Social).
Andronov describe Varsovia como una ciudad envuelta en el caos, con el sonido de fondo de las emisiones de onda corta de las radios extranjeras y la presencia de abundantes agentes secretos occidentales.
El mismo periodista -con detalles propios de la «serie negra»- describe cómo encontró en el tren que le conducía a Polonia a un occidental borracho, «alto y de rostro huesudo», que reconoció ser «un auténtico espía de la OTAN ».
Como viene siendo frecuente en la Prensa soviética, Literaturnaya Gazeta afirma que Solidaridad es una «simple criatura del KOR». En su reportaje, Andronov escribe que Jacek Kuron «hace mucho tiempo que no trabaja y, sin embargo, gasta abundantes dólares y marcos occidentales».
Hacia el final de su reportaje, Andronov acusa, entre otros, al primer ministro de Baviera, Joseph Strauss, de financiar a Solidaridad, y afirma haber visto algunos documentos de este sindicato encabezados por la cruz gamada. Según Auchonov, en Polonia los elementos socialistas convertidos en líderes sindicales se esfuerzan por conseguir el poder político. La información de Literaturnaya Gazeta es probablemente la más dura sobre Polonia publicada en la URSS.