Tribuna:

Más claridad todavía

La ley del Deporte prevé unos presupuestos mínimos para el Consejo Superior de Deportes equivalentes al 22% de la recaudación anual de las quinielas. La ley del Deporte prevé también que este año las diputaciones provinciales tendrán que invertir en esta materia el 11 % que reciben de las quinielas. El presupuesto deportivo español con el incremento de los ingresos provinciales ha pasado a ser uno de los más importantes de Europa y del mundo. El Consejo de Deportes entre recursos propios y ajenos puede realizar una planificación sin agobios.Por vez primera podría afirmarse que el deporte nada ...

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La ley del Deporte prevé unos presupuestos mínimos para el Consejo Superior de Deportes equivalentes al 22% de la recaudación anual de las quinielas. La ley del Deporte prevé también que este año las diputaciones provinciales tendrán que invertir en esta materia el 11 % que reciben de las quinielas. El presupuesto deportivo español con el incremento de los ingresos provinciales ha pasado a ser uno de los más importantes de Europa y del mundo. El Consejo de Deportes entre recursos propios y ajenos puede realizar una planificación sin agobios.Por vez primera podría afirmarse que el deporte nada en la abundancia y nunca como ahora ha habido tantos recursos para dotar la pobre infraestructura nacional. El Consejo, que en los últimos tiempos ha mostrado una clara inclinación hacia la moderación y la clarificación de las cuentas, ha de marcarse en un año como este la necesidad de ofrecer a los medios informativos amplias referencias del empleo de sus recursos. No basta con dar de cuando en cuando notas fraccionarias referentes a las irregularidades. El propio Consejo ha de decir cómo, en qué y dónde emplea sus dineros.

Hay que suponer que tiene en marcha algún plan especial que merecerá la pena conocer. De otra forma, no se explicaría la congelación de ciertos presupuestos que, en definitiva, son un notorio recorte, puesto que al no producirse aumento no se compensa siquiera la inflación. Hay que saber con quién nos jugarnos el dinero.

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