El sucesor de Meliá
Josep Meliá, hasta ayer secretario de Estado para la Información, abandona el puesto tras una intensa labor de dieciséis meses. ( ... )Se plantea ahora su sustitución, y si bien la elección del nuevo secretario de Estado es un asunto que compete exclusivamente al Gobierno, nosotros estimamos que los periodistas tenemos algo que decir sobre las características idóneas que un candidato a tan delicado puesto debería reunir.
En unos momentos tan cruciales para el mundo de la información como los que hoy vive España, sería más que deseable que el nuevo portavoz del Gobierno fuera un impulsor...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Josep Meliá, hasta ayer secretario de Estado para la Información, abandona el puesto tras una intensa labor de dieciséis meses. ( ... )Se plantea ahora su sustitución, y si bien la elección del nuevo secretario de Estado es un asunto que compete exclusivamente al Gobierno, nosotros estimamos que los periodistas tenemos algo que decir sobre las características idóneas que un candidato a tan delicado puesto debería reunir.
En unos momentos tan cruciales para el mundo de la información como los que hoy vive España, sería más que deseable que el nuevo portavoz del Gobierno fuera un impulsor convencido de la libertad de expresión sin ningún tipo de filtros corporativistas, ni «sí, peros» ansonianos.
Y para ello es imprescindible su condición de demócrata integral -porque, hay que decirlo, no todo el mundo dentro de UCD lo es en biografía, talante y actitudes. Esto implica, en primer lugar, la renuncia a la fácil tentación de manipular, desde el poderoso sillón monclovita, los medios informativos más próximos al Gobierno, y a «castigar» a los hostiles.
, 18 de octubre