El primer ministro iraní rechaza la mediación de la Conferencia Islámica

El primer ministro iraní, Mohamed Alí Rajai, rechazó ayer toda misión de negociación o buenos oficios destinada a buscar una solución pacífica a la guerra del golfo Pérsico, que enfrenta desde hace cinco días a los ejércitos de Irán e Irak. La negativa se produjo horas después de que los dos contendientes aceptaran que el presidente de Pakistán, general Zia-Ul-Haq, en nombre de la Conferencia Islámica, viajara a Teherán y Bagdad para escuchar las propuestas de los dos Gobiernos para solucionar el conflicto. «Irán no está dispuesto a pronunciar una palabra de negociación», afirmó el jefe del Go...

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El primer ministro iraní, Mohamed Alí Rajai, rechazó ayer toda misión de negociación o buenos oficios destinada a buscar una solución pacífica a la guerra del golfo Pérsico, que enfrenta desde hace cinco días a los ejércitos de Irán e Irak. La negativa se produjo horas después de que los dos contendientes aceptaran que el presidente de Pakistán, general Zia-Ul-Haq, en nombre de la Conferencia Islámica, viajara a Teherán y Bagdad para escuchar las propuestas de los dos Gobiernos para solucionar el conflicto. «Irán no está dispuesto a pronunciar una palabra de negociación», afirmó el jefe del Gobierno iraní en una declaración transmitida por Radio Teherán. El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas inició una reunión a la 1.15 horas de hoy (hora de Madrid) con el objetivo de acordar una resolución de alto el fuego.Sobre el terreno, los combates continuaron en la jornada del viernes por tierra, mar y aire, centrándose principalmente en la llamada batalla de Jorramshar, población de 70.000 habitantes cercada por las tropas iraquíes y llave del estuario de Chat el Arab y de Abadán, la refinería más importante de Irán y de todo Oriente Próximo, que ayer continuaba ardiendo.

Irak, segundo país exportador del mundo, anunció que suspende totalmente sus exportaciones de petróleo, incluidas las que efectuaba a través de los oleoductos mediterráneos.

Tres autobuses fletados por el Gobierno español iniciaron esta madrugada la evacuación de unos trescientos españoles de Irak. Desde Bagdad viajarán más de mil kilómetros por el desierto hasta Aminán, donde les recogerá un avión de Iberia el domingo.

El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, recibió ayer al embajador iraquí en España, quien le hizo entrega de un mensaje de Saddam Hussein.

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