La clave

Soy uno de esos muchos españoles que creía saturada mi capacidad de asombro. Sin embargo, Televisión Española, una vez más, ha vuelto a sorprenderme con su lúcida y sensata decisión de suprimir el único programa serio que emite en directo, La clave.Estoy de acuerdo con la decisión de sus directivos, sesudos barones muy cultos, leídos y entendidos, como dicen en mi tierra, pero de acuerdo en el cinismo, felonía, insulto, falta de respeto y extravagancia que lleva implícitos tan pedestre decisión. ¿Cómo puede argumentarse, con un mínimo de seriedad, que se suprime el directo por razon...

Soy uno de esos muchos españoles que creía saturada mi capacidad de asombro. Sin embargo, Televisión Española, una vez más, ha vuelto a sorprenderme con su lúcida y sensata decisión de suprimir el único programa serio que emite en directo, La clave.Estoy de acuerdo con la decisión de sus directivos, sesudos barones muy cultos, leídos y entendidos, como dicen en mi tierra, pero de acuerdo en el cinismo, felonía, insulto, falta de respeto y extravagancia que lleva implícitos tan pedestre decisión. ¿Cómo puede argumentarse, con un mínimo de seriedad, que se suprime el directo por razones económicas? ¿Cómo es posible tanto cinismo e hipocresía? ¿Cuánto le cuesta a Televisión Española, al ciudadano-contribuyente español, al fin y al cabo, la bazofia de toda la programación con que RTVE nos tortura día a día? ¿Hasta cuándo tendremos que sufrir la incompetencia, inmoralidad, vileza, chabacanería e insultos permanentes de los irresponsables- responsables directivos de Televisión Española?

Naturalmente que estoy de acuerdo y apoyo la decisión seria, justa, honesta y profesional de todo el equipo de La clave al negarse a ser títeres de un capricho. La clave en diferido sería lo mismo que televisión en directo: una náusea Y un bostezo./