Cuatro centros municipales de salud entran en pleno funcionamiento en septiembre

Los cuatro centros de promoción de la salud inaugurados por el ayuntamiento a mediados de julio entrarán en funcionamiento pleno a primeros del próximo mes de septiembre. Estos establecimientos, antiguas casas de socorro, podrán ser utilizados gratuitamente por todos los ciudadanos residentes en el distrito en el que el centro esté situado.

Estos cuatro primeros centros -otros tres se abrirán antes de fin de año y cinco más en 1981- están preparados para ofrecer servicios de puericultura, planificación familiar, detección oncológica y salud mental. Los primeros centros están situados en...

Los cuatro centros de promoción de la salud inaugurados por el ayuntamiento a mediados de julio entrarán en funcionamiento pleno a primeros del próximo mes de septiembre. Estos establecimientos, antiguas casas de socorro, podrán ser utilizados gratuitamente por todos los ciudadanos residentes en el distrito en el que el centro esté situado.

Estos cuatro primeros centros -otros tres se abrirán antes de fin de año y cinco más en 1981- están preparados para ofrecer servicios de puericultura, planificación familiar, detección oncológica y salud mental. Los primeros centros están situados en los distritos de Chamberí, Latina, Vallecas y Tetuán, y para que sean conocidos por los vecinos de cada una de estas zonas, la Delegación Municipal de Sanidad va a poner en marcha una campaña consistente en la colocación de carteles explicativos en todos los comercios del distrito. El resto de la información correrá a cargo de las entidades ciudadanas de cada distrito, que además podrán Fiscalizar el funcionamiento de estos centros a través de las juntas municipales de distrito.Esta fiscalización del usuario y del vecino en general podrá determinar cuál es el horario de funcionamiento o la actuación de un médico; en suma, temas siempre de carácter técnico.

José María Santos, delegado municipal de Sanidad, asegura que la importancia de estos centros estriba en que la actividad preventiva, que básicamente se va a desarrollar en ellos, servirá para responder a un derecho ciudadano -no exclusivamente del trabajador, como ocurre con la Seguridad Social- y, sobre todo, para los 300.000 madrileños que carecen de Seguridad Social, sociedades médicas o que, por supuesto, no pueden recurrir a la medicina privada. «No obstante, nosotros no pretendemos cubrir ese vacío, porque no es obligación del ayuntamiento, ni tenemos recursos para hacerlo, pero sí pienso que podemos contribuir a resolver ciertos problemas y a orientar a los vecinos sobre su salud».

Las características de cada distrito van a ser consideradas en cada uno de los centros, según su ubicación. Así, en una barriada como Vallecas, donde el consumo de drogas preocupa a muchas familias, se pondrá especial atención en la adicción a los estupefacientes. O si en Chamberí hay una población predominante de gente incluida en la tercera edad, se facilitará atención geriátrica. Con todo, José María Santos asegura que los centros de salud están orientados hacia la medicina preventiva y a la detección de cualquier clase de enfermedad. Luego, gracias a conciertos con entidades tales como la Asociación Española Contra el Cáncer, Cruz Roja o el Hospital Oncológico, se pasará al diagnóstico y al tratamiento.

«Lo que también aseguramos», explica José María Santos, «es que quienes soliciten los servicios del centro van a recibir una atención totalmente modélica. Se va a terminar el recibir a un paciente en dos o tres minutos. Si alguien necesita más de una hora, se le dedicará el tiempo que necesite. Aquí lo que no tratamos son urgencias, porque para eso hay otros centros. Y por eso el personal que hemos contratado no va a escatimar tiempo ni dedicación a cada uno de los enfermos».

Oposición de UCD y del Colegio de Médicos

Por diferentes motivos, la transformación de las antiguas casas de socorro en centros de promoción de la salud suscitó desde el primer momento las críticas desfavorables del grupo de concejales de UCD, y más tarde, del Colegio Oficial de Médicos. De hecho, estos últimos han interpuesto un recurso, que en breve será contestado por el ayuntamiento.La negativa de los concejales centristas se planteaba porque la transformación se hacía sin la autorización de la Dirección General de Administración Local. Aunque posteriormente esta entidad diera el visto bueno al proyecto, el grupo ucedista votó en contra durante la sesión plenaria en la que se trató el tema.

El Colegio Oficial de Médicos de Madrid planteó su recurso, que se basaba en que las plazas de médico se transformaban en plazas para psiquiatras y psicólogos, a la vez que el proyecto suponía un aumento del paro para la profesión. «Eso no es cierto» asegura el delegado de Sanidad, «porque en la práctica han entrado contratados dieciséis nuevos médicos, que lo harán por oposición al año que viene. Respecto a la transformación de la plantilla, ese es un asunto interno del ayuntamiento, en el que nada puede decir el Colegio de Médicos».

La colocación del "diu"

El hecho de que en los centros de salud los ginecólogos puedan colocar a las mujeres que lo necesiten y lo quieran un dispositivo intrauterino, diu, también suscitó en su momento múltiples críticas, pese a que, como aseguran el concejal y el delegado, «a nadie se le va a imponer un método anticonceptivo determinado, y vamos a actuar siempre dentro de la legalidad más estricta».El coste total del funcionamiento de estos centros aún está por determinar, pero, según las primeras apreciaciones, cada uno de estos establecimientos tendrá un coste anual de trece millones de pesetas, con cargo al presupuesto ordinario.

La selección del personal que atenderá los centros se ha hecho según el historial profesional de cada uno de ellos. En cada local hay dos ginecólogos, dos psiquiatras, dos psicólogos, un internista, un puericultor, un técnico en salud comunitaria, un ATS, un enfermero y un celador.