Paralizados casi todos los puertos franceses

Una comisión negociadora intentó ayer en El Havre (Normandía) encontrar una solución al conflicto de los pescadores franceses, que afecta ya a casi todos los puertos de Francia, informa Efe. El conflicto, iniciado por los pescadores de Boulogne Sur Mer (Normandía) hace ya un mes, tomó ayer carácter nacional, al quedar paralizados por la huelga los principales puertos franceses, tanto de la costa atlántica como mediterránea.

Los trabajadores asalariados reivindican sustanciales mejoras salariales y la seguridad de que sus puestos de trabajo no desaparecerán al ser reorganizada la activid...

Una comisión negociadora intentó ayer en El Havre (Normandía) encontrar una solución al conflicto de los pescadores franceses, que afecta ya a casi todos los puertos de Francia, informa Efe. El conflicto, iniciado por los pescadores de Boulogne Sur Mer (Normandía) hace ya un mes, tomó ayer carácter nacional, al quedar paralizados por la huelga los principales puertos franceses, tanto de la costa atlántica como mediterránea.

Los trabajadores asalariados reivindican sustanciales mejoras salariales y la seguridad de que sus puestos de trabajo no desaparecerán al ser reorganizada la actividad del sector, mientras los armadores se han declarado incapaces de dar satisfacción a estas reivindicaciones si el Estado no les ayuda. La segunda parte de este doble conflicto es la lucha de los pequeños patronos independientes frente al Gobierno, ya que los pescadores autónomos reclaman mayores subvenciones, o lo que es lo mismo, una compensación ante el aumento del precio del carburante, sin lo cual no pueden asegurar su supervivencia.Tanto a los asalariados como a los trabajadores autónomos, el Gobierno ha contestado con un rotundo no. El ministro de Transportes argumentó en este sentido que el carburante francés es de los más baratos de la Comunidad Económica Europea. «El Gobierno», declaró ayer el ministro francés de Transportes, Joel le Theule, «no dejará que la situación se degrade», pero que Francia debe atenerse al plan europeo y respetar la política comunitaria, refiriéndose a la reciente declaración del Consejo de Europa, que considera «competencia desleal» cierto tipo de subvenciones estatales.

Por su parte, el Gobierno británico comunicó a su homólogo francés su «profunda preocupación» por el bloqueo de los puertos franceses y la situación en que se encuentran los turistas británicos bloqueados en los mismos. También advirtió a los comandantes de navegación contra cualquier intento de fondear en los mismos por la fuerza.

La situación en el puerto inglés de Dover ha mejorado ostensiblemente tras la jornada del lunes, en la que fueron transportados 11.000 vehículos y 325.000 pasajeros a los puertos belgas de Ostende y Brujas, logrando así que el tiempo medio de embarcar fuera sólo de una hora. Hasta la princesa Ana de Inglaterra tuvo que desembarcar en el puerto de Brujas el lunes pasado, desde donde siguió viaje en automóvil hacia Francia, acompañada de su séquito.

En Ostende, unos 20.000 pasajeros embarcaron con destino a Inglaterra en los últimos tres días, y a pesar de que este puerto registra un tráfico tres veces más intenso de lo normal, no ha habido hasta el momento problemas de congestión portuaria.

Los pescadores del puerto de Cherburgo permitieron la entrada en el mismo de un transbordador que permanecía al pairo desde el lunes, a la espera de los resultados de las conversaciones entre los armadores y los pescadores. El transbordador admitido en el puerto es el Wiking Valiant, que zarpó el lunes de Dover con la intención de romper el bloqueo, pero su capitán desechó la idea tras considerar el «gran peligro que correrían los setecientos pasajeros». El mismo transbordador, según informa France Presse, podrá regresar a Inglaterra con 1.200 de los 6.000 turistas ingleses bloqueados en el puerto, tras la decisión adoptada por los pescadores de levantar provisionalmente el bloqueo por «razones humanitarias».