La izquierda portuguesa solicita una investigación parlamentaria sobre Sa Carneiro

A menos de dos meses de las elecciones generales del 5 de octubre, el Grupo parlamentario Socialista va a solicitar una investigación parlamentaria sobre las irregularidades financieras atribuidas al primer ministro, Francisco Sa Carneiro.

El martes, en Lisboa, el líder socialista Mario Soares anunció que, frente a la ausencia de respuesta del primer ministro a las acusaciones formuladas contra él, los socialistas iban a solicitar de la comisión permanente una reunión extraordinaria para discutir sobre la necesidad de ordenar la apertura de una investigación capaz de esclarecer los acon...

A menos de dos meses de las elecciones generales del 5 de octubre, el Grupo parlamentario Socialista va a solicitar una investigación parlamentaria sobre las irregularidades financieras atribuidas al primer ministro, Francisco Sa Carneiro.

El martes, en Lisboa, el líder socialista Mario Soares anunció que, frente a la ausencia de respuesta del primer ministro a las acusaciones formuladas contra él, los socialistas iban a solicitar de la comisión permanente una reunión extraordinaria para discutir sobre la necesidad de ordenar la apertura de una investigación capaz de esclarecer los acontecimientos que comprometen la honorabilidad del primer ministro y de su Gobierno.La coalición gubernamental de Alianza Democrática y el partido socialdemócrata del primer ministro han reaccionado violentamente contra la iniciativa socialista, anunciando que no autorizarán que la comisión permanente trate del caso.

En varias ocasiones, desde 1976, el periódico comunista O Diario ha mantenido que Francisco Sa Carneiro y su hermano no han pagado a la banca -estatalizada en 1975- una deuda de doce millones de escudos (cerca de veinte millones de pesetas) contraída en 1973, que, con los intereses acumulados desde entonces, se elevaría hoy a 32 millones de escudos (45 millones de pesetas).

Sa Carneiro se ha limitado siempre a afirmar, en base a una carta del gerente del Banco Espirito Santo, que no tenía ninguna deuda pendiente. Cuando el diario comunista insistió en sus acusaciones, demostrando que la deuda había sido simplemente transferida al nombre del hermano del dirigente socialdemócrata y posteriormente abonada en una cuenta de Lisboa, abierta en condiciones irregulares y a nombre de un individuo no identificado, Sa Carneiro presentó una demanda por difamación.