Terminaron las fiestas del distrito de Chamberí

Los vecinos de Chamberí se despidieron ayer de las fiestas en honor de su patrona-, la Virgen del Carmen, con una gran pintada infantil, en la acera que rodea el edificio del antiguo hospital de Maudes, seguida de una merienda-cena en los jardines del Canal de lsabel II, en medio de luces multicolores, baile de orquestina y concurso de chotis. Al filo de la noche, casi a la hora de la Cenicienta, estalló un castillo de fuegos artificiales, como final ruidoso de unos festejos que han durado una semana y que han incorporado casi al 20% de niños y ciudadanos del distrito.Las verbenas diarias en l...

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Los vecinos de Chamberí se despidieron ayer de las fiestas en honor de su patrona-, la Virgen del Carmen, con una gran pintada infantil, en la acera que rodea el edificio del antiguo hospital de Maudes, seguida de una merienda-cena en los jardines del Canal de lsabel II, en medio de luces multicolores, baile de orquestina y concurso de chotis. Al filo de la noche, casi a la hora de la Cenicienta, estalló un castillo de fuegos artificiales, como final ruidoso de unos festejos que han durado una semana y que han incorporado casi al 20% de niños y ciudadanos del distrito.Las verbenas diarias en la plaza de Olavide y la asidua presencia de tenderetes de asociaciones de vecinos y de casetas del PSOE y del PCE, donde se vendían pinchos, limonada, chocolate y rosquillas, han hecho recobrar la tradición perdida en uno de los barrios más castizos.

La espectacular pintada final, bajo el lema «Salvad Maudes», congregó a más de doscientos niños, que, provistos de tizas de colores, parcelaron la acera del antiguo hospital de jornaleros de Maudes y crearon un ambiente de regocijo entre los chavales, que luego fueron compensados con premios casi para todos (discos, camisetas y libros). Sobre las torres y cristaleras del hospital se veían figuras móviles y molinos de viento que había diseñado el artista Julio Alvarez. «No sólo queremos divertirnos, sino tratar de impedir la subasta del antiguo hospital». La Asociación de Vecinos El Organillo -que amenizó - la pintada con dulces sones precisamente de organillo- y Julio Alvarez patrocinan una resurrección del antiguo patronato para conservar el edificio para uso de los vecinos.

Caravanas en las que participaron los bomberos y Policía Municipal, pasacalles, títeres, rock, maratones y charangas han mantenido vivo el sentido de vecindad en un distrito tan díspar como Chaniberí, donde conviven palacetes y casas señoriales con subarriendos y buhardillas, una población joven de profesionales con un alto porcentaje de ancianos vecínos desde siempre en Chamberí. La comisión de festejos ha convertido al distrito en una barraca de feria gracias al estirón del presupuesto (1.200.000 pesetas), obtenido a través del ayuntamiento y las firmas comerciales de la zona.

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