"Vía rapida" para el enjuiciamiento de algunos delitos
La Comisión de Justicia del Congreso inició ayer el estudio del proyecto de ley sobre enjuiciamiento oral de delitos, dolosos menos graves y flagrantes, con el que se pretende agilizar el procedimiento judicial, reduciendo al máximo la vía escrita y dar mayor rapidez a la tramitación de los miles de asuntos que actualmente agobian a los juzgados.El Grupo parlamentario Comunista presentó un texto alternativo como enmienda a la totalidad, por entender que el proyecto del Gobierno no soluciona nada
Antes de iniciarse el debate sobre el proyecto de ley, el ministro de Justicia, Iñigo Cavero...
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La Comisión de Justicia del Congreso inició ayer el estudio del proyecto de ley sobre enjuiciamiento oral de delitos, dolosos menos graves y flagrantes, con el que se pretende agilizar el procedimiento judicial, reduciendo al máximo la vía escrita y dar mayor rapidez a la tramitación de los miles de asuntos que actualmente agobian a los juzgados.El Grupo parlamentario Comunista presentó un texto alternativo como enmienda a la totalidad, por entender que el proyecto del Gobierno no soluciona nada
Antes de iniciarse el debate sobre el proyecto de ley, el ministro de Justicia, Iñigo Cavero, respondió a dos preguntas, planteadas por los diputados. A la primera de ellas, formulada por Rodolfo Guerra (Socialistas de Cataluña), sobre presunto! malos tratos a tres mujeres, antes de su ingreso en la prisión de la Trinidad, de Barcelona, respondió el ministro que del informe que realizó la Dirección General de Instituciones Penitenciarias se deduce que ninguna de las tres mujeres presentaban señales de haber recibido malos tratos y que sólo en un caso fue necesario internar a una de las reclusas.
El diputado Leopoldo Torres formuló la segunda pregunta sobre la no inscripción en el Registro Civil de una niña, a la que sus padres querían ponerle el nombre de Libertad. El ministro respondió que, este tema está pendiente de la decisión de los tribunales, pero que su posición personal es que cada padre puede poner a su hijo el nombre que desee, dentro de los límites del Código Penal.