El drama del Chad

«Una vez más, el Chad está poseído por sus demonios, que son los de la guerra civil. El Gobierno de Unión Nacional, milagrosamente constituido en noviembre último, no es más que una apariencia. Las diversas facciones que bajo la presión de los amigos de Chad, en particular Francia, habían concluido una tregua política, se desgarran de nuevo.Es posible que Libia, y más precisamente el dinero de Gadafi, no sean extraños a los incidentes de estos últimos tres días. Trípoli no ha renunciado a jugar aquí, como en otra parte, unj uego complicado, tenebroso y, para decirlo con toda claridad, incompre...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

«Una vez más, el Chad está poseído por sus demonios, que son los de la guerra civil. El Gobierno de Unión Nacional, milagrosamente constituido en noviembre último, no es más que una apariencia. Las diversas facciones que bajo la presión de los amigos de Chad, en particular Francia, habían concluido una tregua política, se desgarran de nuevo.Es posible que Libia, y más precisamente el dinero de Gadafi, no sean extraños a los incidentes de estos últimos tres días. Trípoli no ha renunciado a jugar aquí, como en otra parte, unj uego complicado, tenebroso y, para decirlo con toda claridad, incomprensible si se buscan objetivos racionales. Pero el fondo del asunto se resume en tres interrogantes: ¿el Chad es viable?, ¿es gobernable?, ¿las poblacionjes que viven en su territorio pueden cohabitar sin hacerse la guerra?

Como otros Estados africanos actuales, el Chad ha comenzado por ser una división administrativa del imperio colonial francés, un territorio de Francia en ultramar, cuyas fronteras han sido trazadas en función de criterios administrativos o militares franceses. Más infortunado que los otros, no tiene ninguna homogenidad cultural, económica, geográfica. Además, se encuentra situado en un sector particularmente neurálgico del continente africano. )»

25 de marzo

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En