Dificultades en los proyectos cinematográficos para TVE

Los 1.300 millones de pesetas destinados por el Ministerio de Cultura para la producción de material filmado, de carácter cultural y con cargo al presupuesto de RTVE-1979, se encuentran, de momento, congelados debido a las dificultades burocráticas que RTVE exige a los productores cinematográficos cuyos proyectos fueron seleccionados.«El Ministerio de Cultura, atendiendo tanto a la creciente demanda cultural de la sociedad española como a las circunstancias por las que actualmente atraviesa la industria cinematográfica de nuestro país», dice la Orden de convocatoria de 1 de agosto de 1979...

Los 1.300 millones de pesetas destinados por el Ministerio de Cultura para la producción de material filmado, de carácter cultural y con cargo al presupuesto de RTVE-1979, se encuentran, de momento, congelados debido a las dificultades burocráticas que RTVE exige a los productores cinematográficos cuyos proyectos fueron seleccionados.«El Ministerio de Cultura, atendiendo tanto a la creciente demanda cultural de la sociedad española como a las circunstancias por las que actualmente atraviesa la industria cinematográfica de nuestro país», dice la Orden de convocatoria de 1 de agosto de 1979 (Boletín Oficial del Estado, BOE, de 6 de agosto de 1979), «se propone promover, a través de las direcciones generales de Radiodifusión y Televisión y de Cinematografía, la producción de material filmado de carácter cultural destinado a su programación en televisión y a su exhibición y distribución a través de otros medios.»

Una segunda Orden del Ministerio de Cultura (de 27 de diciembre de 1979, BOE del 9 de febrero de 1980) publicaba la selección de los diecisiete proyectos, en su mayoría, series o seriales, después de cumplir los trámites requeridos en la convocatoria que, fundamentalmente, eran: un tratamiento amplio, avance del presupuesto y previsiones financieras, plan de producción preventivo y «una propuesta de equipo técnico y artístico, la cual deberá fijarse definitivamente de común acuerdo entre TVE y la empresa productora».

Todo parecía, hasta aquí, aparentemente, correcto, pero con fecha 14 de enero de 1980, Javier Juan-Aracil envía cartas a las productoras de los proyectos aprobados, en las que, después de matizar que el Ministerio de Cultura «resolvió seleccionar, en principio» los proyectos, se añade textualmente: «TVE debe ahora, de acuerdo con lo resuelto, iniciar el estudio de los guiones y preparar las condiciones técnicas y de producción para llevar a cabo el proyecto de acuerdo con ustedes. Por todo ello, les ruego que, a la mayor brevedad posible, remitan a esta Gerencia de TVE los guiones completos, plan de trabajo, presupuesto, relación de equipos técnicos y artísticos y cualquier dato que consideren de interés para la producción de su proyecto.»

Los productores estiman que las obligaciones contractuales (firma de contratos con guionistas, directores, técnicos, etcétera) que TVE les exige antes de formalizar el contrato suponen la inversión previa de más de 177 millones de pesetas, antes de iniciarse los rodajes y para el total de los diecisiete proyectos.