Enfrentamiento UCD-PSOE sobre la reforma sanitaria

La Comisión de Sanidad y Seguridad Social debatió ayer las líneas maestras de la reforma sanitaria. Las discrepancias entre socialistas y centristas deberán dilucidarse antes del próximo martes. Antes de las doce de la noche del lunes, día 18, los diferentes grupos parlamentarios deberán presentar sus propuestas. Los intentos de UCD de llegar a un texto convergente no serán aceptados, en principio, por la izquierda, que presentará documentos alternativos.Después del extenso debate registrado ayer en la Comisión de Sanidad y Seguridad Social del Congreso, los centristas manifestaron a EL PAÍS q...

La Comisión de Sanidad y Seguridad Social debatió ayer las líneas maestras de la reforma sanitaria. Las discrepancias entre socialistas y centristas deberán dilucidarse antes del próximo martes. Antes de las doce de la noche del lunes, día 18, los diferentes grupos parlamentarios deberán presentar sus propuestas. Los intentos de UCD de llegar a un texto convergente no serán aceptados, en principio, por la izquierda, que presentará documentos alternativos.Después del extenso debate registrado ayer en la Comisión de Sanidad y Seguridad Social del Congreso, los centristas manifestaron a EL PAÍS que ha quedado perfectamente demostrado que la postura del Grupo Socialista es ambigua, contradictoria y poco responsable. «Si rechaza el documento que en su momento firmó y que posibilitaba la plataforma de acuerdo para relanzar una serie de acciones que habrían de repercutirá de forma muy directa en una mejora de la salud pública y la asistencia sanitaria», manifestaron «será responsable ante sí mismo por el incumplimiento de sus compromisos, y ante el pueblo español por el retraso que puede suponer para la puesta en marcha de acciones concretas de reforma sanitaria.»

Los socialistas, por su parte, expresaron a EL PAÍS las discrepancias con la reforma sanitaria proyectada por el Gobierno. Donato Fuejo señaló: «Se intenta manipular al Parlamento, utilizando un documento de reforma que defiende una política de salud que favorezca a los grupos de presión.»