El conflicto en el reparto de butano impide que se repartan bombonas a domicilio

Los usuarios de bombonas de butano sólo podrán comprar éstas en camiones situados en la calle durante los próximos días, a raíz de la postura adoptada por la patronal de no permitir el reparto a un número determinado de trabajadores hasta que éstos no acepten algunas condiciones. El conflicto se inició el pasado viernes, después de que un gran número de repartidores se concentrara en horas de trabajo delante del edificio de los juzgados para apoyar a Manuel Fernández Somiedo, dirigente de CSUT, central mayoritaria en el sector, juzgado por haber formado parte de un piquete en enero del pasado ...

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Los usuarios de bombonas de butano sólo podrán comprar éstas en camiones situados en la calle durante los próximos días, a raíz de la postura adoptada por la patronal de no permitir el reparto a un número determinado de trabajadores hasta que éstos no acepten algunas condiciones. El conflicto se inició el pasado viernes, después de que un gran número de repartidores se concentrara en horas de trabajo delante del edificio de los juzgados para apoyar a Manuel Fernández Somiedo, dirigente de CSUT, central mayoritaria en el sector, juzgado por haber formado parte de un piquete en enero del pasado año.

La respuesta al paro de los trabajadores por parte de la patronal fue la de rescindir los contratos a 148 trabajadores, con la intención de incorporar posteriormente a muchos de ellos a las empresas después de la firma de un nuevo contrato. Según informaron ayer miembros de CSUT, en el nuevo documento que tendrían que firmar figura «la renuncia a la huelga como presión para defender nuestros intereses».José Gonzalo, secretario de la asociación regional centro de empresas distribuidoras de gases licuados del petróleo, informó que esto no era verdad, «ya que, entre otras cosas, no sería constitucional. La diferencia entre los antiguos y los nuevos contratos consiste, para alguna de las empresas distribuidoras, en el cambio de vigencia del contrato, situado hasta ahora en tres años, y en la elección de personal contratado. Comprendemos que ha sido una postura radical, pero la hemos tomado ante el hecho de que CSUT convoque huelgas por cualquier motivo, como prueba el hecho de que llevemos once en un año».

Por su parte, CSUT denunció ayer que la actitud de las empresas distribuidoras de no permitir cargar a los repartidores, es una represalia ante la decisión de los trabajadores de querer integrarse en la plantilla de Butano, SA, para que esta empresa asuma directamente el reparto sin intermediarios.

Las empresas distribuidoras, por otra parte, han solicitado de Butano, SA, que determine cuál será el precio de estas botellas vendidas en la calle, ya que, tal como informaron trabajadores de CSUT, no se puede cobrar 360 pesetas como si se sirvieran a domicilio. Los empresarios, sin embargo, argumentan que el precio tampoco puede ser el que tienen las bombonas en almacén -335 pesetas-, ya que existen unos gastos de transporte y personal.

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