Posible firma de un convenio entre los alcaldes de Madrid y París
El alcalde de Madrid, Enrique Tierno, completó ayer su primera jornada de estancia oficial en París, durante la cual celebró una larga sesión de trabajo con su colega y anfitrión, Jacques Chirac, se entrevistó con el secretario general del Partido Socialista francés, François Mitterrand, y participó, con la delegación que preside, en varias reuniones de trabajo con altos funcionarios del primer municipio francés.Este primer día de la visita de Tierno a París se ha movido, no obstante, dentro de los estrictos límites de la política municipal, un tanto en contra de los deseos y del enfoque del v...
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El alcalde de Madrid, Enrique Tierno, completó ayer su primera jornada de estancia oficial en París, durante la cual celebró una larga sesión de trabajo con su colega y anfitrión, Jacques Chirac, se entrevistó con el secretario general del Partido Socialista francés, François Mitterrand, y participó, con la delegación que preside, en varias reuniones de trabajo con altos funcionarios del primer municipio francés.Este primer día de la visita de Tierno a París se ha movido, no obstante, dentro de los estrictos límites de la política municipal, un tanto en contra de los deseos y del enfoque del viaje que se había hecho el ex presidente del PSOE, que pretendía mantener contactos a nivel político y económico en las relaciones entre los dos Estados.
Chirac, que había declarado con anterioridad que no pensaba entrar en ningún momento en temas de política de Estado y aún menos en temas económicos relacionados con la adhesión de España a la CEE, a la cual se opone categóricamente cumplió lo prometido.
El alcalde de París, líder indiscutible de la derecha gaullista, recibió a Enrique Tierno con extremada cordialidad, tanto en su entrevista en el hotel de Ville como en la cena de gala que le ofreció, a la que asistieron representantes del mundo económico y financiero, de la cultura y las letras y de la universidad y la ciencia. Sin embargo, a pesar de que Tierno declaró a la salida que se sentía satisfecho de sus contactos con Chirac, éste rehusó hacer cualquier tipo de planteamientos políticos generales.
De la entrevista entre ambos salió un compromiso de colaboración técnica y cultural entre los dos ayuntamientos, que quizá se plasme hoy en la firma de un convenio entre ambas alcaldías. También se planteó la posibilidad, por parte de Chirac, de una presencia madrileña en reuniones periódicas que mantienen los alcaldes de las capitales y principales ciudades de los países de la CEE; ello como respuesta de la tesis expuesta por Tierno de la Europa de los municipios por encima de los intereses de los Estados.
Por lo demás, se cree saber que Chirac escuchó atentamente la exposición puntual de Tierno sobre las negociaciones que mantiene España para su ingreso en la CEE, sin comprometerse en sus respuestas ni en la posición de su partido.
Incluso en la cena de gala que ofreció Chirac, éste volvió a insistir en que ambos alcaldes no debían interferirse en las decisiones de tipo político, que están reservadas a los Gobiernos, a pesar de lo cual Tierno aludió en su discurso nuevamente a temas relacionados con la CEE y España.
El resto de la jornada de la delegación municipal que preside Tierno se desarrolló en la prefectura de París, donde tuvieron lugar unas conversaciones sobre urbanismo, en las cuales los municipios parisienses desarrollaron las perspectivas urbanísticas del París del año 2000, para posteriormente celebrar otras reuniones sobre temas municipales.
El contenido más político de la jornada -quizá para contrarrestar la escasa atención en este sentido de Chirac- lo dio la entrevista que mantuvieron en el hotel donde se aloja la delegación madrileña Tierno y Mitterrand. Este último mostró a Tierno su adhesión a la entrada de España en la CEE, aunque dijo que las negociaciones serán laboriosas, y se deshizo en elogios hacia el alcalde de Madrid. También anunció que visitará pronto Madrid.
Enrique Tierno visitó igualmente una exposición de pintura española del siglo XVIII, en el Gran Palais, donde también tiene lugar una exposición antológica del pintor malagueño Pablo Picasso. Al parecer, la delegación madrileña prefirió visitar la primera de ambas, para no entrar en motivaciones presuntamente políticas relacionadas con la herencia de Picasso, que el Estado francés ha nacionalizado en la práctica con esta exposición.