Los fabricantes de recambios piden revisión de impuestos

La presión fiscal que supone el 26% del nuevo impuesto sobre los automóviles pone en peligro la supervivencia de las empresas, dijo Enrique Fernández Lagilhoat, director general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Componentes (ANFAC).Con el nuevo impuesto, añadió, que entró en vigor el primero de octubre, la presión fiscal ha aumentado en cuatro puntos, y somete al comprador español a un tipo impositivo que se sitúa en el 43,35%, muy superior a la de los países europeos.

Respecto al impuesto de lujo sobre los repuestos de automóviles, con un tipo del 25%, Laguilhoa...

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La presión fiscal que supone el 26% del nuevo impuesto sobre los automóviles pone en peligro la supervivencia de las empresas, dijo Enrique Fernández Lagilhoat, director general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Componentes (ANFAC).Con el nuevo impuesto, añadió, que entró en vigor el primero de octubre, la presión fiscal ha aumentado en cuatro puntos, y somete al comprador español a un tipo impositivo que se sitúa en el 43,35%, muy superior a la de los países europeos.

Respecto al impuesto de lujo sobre los repuestos de automóviles, con un tipo del 25%, Laguilhoat dijo que lo consideraba un impuesto desmesurado, injusto e insólito para un período transitorio mientras no se aplica el impuesto sobre el valor añadido.

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El director general de ANFAC dijo que los fabricantes piden un impuesto único del 20%, similar a la imposición más fuerte de Europa, y que se aplace la entrada en vigor del impuesto de lujo sobre repuestos de automóviles.

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