AEORMA-Cuenca del Duero, contra la Michelin de Valladolid

AEORMA-Cuenca del Duero ha presentado un escrito en el Ayuntamiento de Valladolid en el que pide a la Corporación municipal que «no conceda licencia para legalizar la factoría SAFE Neumáticos Michelín, ya que tal concesión sería ilegal por contravenir lo dispuesto en el reglamento de actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas».La fábrica vallisoletana de Michelín, cuyo director sufrió un intento de secuestro por parte de ETA hace varias semanas, se halla ubicada en el polígono del Cabildo y comenzó a funcionar hace más de cuatro años. Sin embargo, y según se desprende de un escrito...

AEORMA-Cuenca del Duero ha presentado un escrito en el Ayuntamiento de Valladolid en el que pide a la Corporación municipal que «no conceda licencia para legalizar la factoría SAFE Neumáticos Michelín, ya que tal concesión sería ilegal por contravenir lo dispuesto en el reglamento de actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas».La fábrica vallisoletana de Michelín, cuyo director sufrió un intento de secuestro por parte de ETA hace varias semanas, se halla ubicada en el polígono del Cabildo y comenzó a funcionar hace más de cuatro años. Sin embargo, y según se desprende de un escrito hecho público por el Ayuntamiento, en el que se anuncia la apertura de un período de información pública sobre la solicitud de licencia para legalizar la factoría de Michelín, la empresa fabricante de neumáticos no ha contado durante los cuatro años con autorización municipal para desarrollar sus actividades.

AEORMA-Cuenca del Duero basa también su oposición a la concesión de licencia en que el «plan parcial del polígono del Cabildo, aprobado en 1972, autoriza la instalación de industrias, pero prohibe expresamente en sus ordenanzas la instalación de industrias peligrosas, por lo que es imposible ubicar en él una factoría dedicada a la fabricación de neumáticos. En el artículo cuatro del reglamento de actividades molestas -añade el escrito- se establece que las industrias calificadas como peligrosas sólo podrán emplazarse a una distancia superior a 2.000 metros del núcleo de población más cercano.