Derrota de la derecha

La espectacular pérdida de votos experimentada por UCD y CD en los núcleos de población más importantes de Galicia y los avances conseguidos por el PCE y la coalición regionalista Unidade Galega, junto a los buenos resultados alcanzados por el PSOE, han determinado que La Coruña, Vigo y El Ferrol vayan a tener alcaldes de izquierda. No obstante, el partido gubernamental triunfó en la mayor parte de los municipios y obtuvo un número de concejales, 1.793, que le asegura el control de las cuatro diputaciones provinciales.Ayer mismo comenzaron las reuniones entre dirigentes de partidos y coalicion...

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La espectacular pérdida de votos experimentada por UCD y CD en los núcleos de población más importantes de Galicia y los avances conseguidos por el PCE y la coalición regionalista Unidade Galega, junto a los buenos resultados alcanzados por el PSOE, han determinado que La Coruña, Vigo y El Ferrol vayan a tener alcaldes de izquierda. No obstante, el partido gubernamental triunfó en la mayor parte de los municipios y obtuvo un número de concejales, 1.793, que le asegura el control de las cuatro diputaciones provinciales.Ayer mismo comenzaron las reuniones entre dirigentes de partidos y coaliciones con vistas a estudiar posibles acuerdos para la elección de alcaldes en las localidades donde las diferencias de unos y otros son escasas. La solución parece compleja en muchos casos, ya que, si bien no existe duda de que PSOE y PCE pactarán, el peso de la coalición de nacionalistas será decisivo a la hora de concretar si el alcalde va a ser socialista, comunista o nacionalista.

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Algunos militantes de la coalición Unidade Galega, integrada por el Partido Obreiro Galego, el Partido Socialista Galego y el Partido Galleguista, no descartan que sus dirigentes, que en su mayoría se califican de marxistas, podrían sucumbir ante promesas de UCD e imposibilitar, con el considerable número de concejales obtenidos, el triunfo de la izquierda en Vigo y La Coruña, ciudades en las que el fracaso de UCD ha sido estrepitoso, pese a haber contado en la primera de ellas con un candidato que se esperaba que barriese: Víctor Moro. Los presentimientos de ciertos militantes de Unidade Galega fueron descalificados por el dirigente de esta fuerza, Camilo Nogueira, quien afirmó a EL PAÍS que ellos harán pactos de sentido progresista, pero exigen contrapartidas mutuas: «No vamos a dar por hecho los acuerdos que realicen Guerra y Carrillo en Madrid. »

La otra fuerza regionalista que ha obtenido concejales en las grandes ciudades, el Bloque Nacional Popular Galego, celebrará en los próximos días una reunión para concretar su postura respecto a los municipios en los que las alianzas aparecen como decisivas. Pedro Luaces, secretario general de la Unió do Povo Galego, partido base de la coalición, declaró a EL PAÍS que ellos apoyarán a la izquierda, ya que son parte de ella, pero sin realizar pacto global alguno. «Analizaremos caso por caso -comentó- y respaldaremos al candidato que nos parezca más honesto.»

Alcaldes socialistas

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Aunque los pactos todavía no han sido especificados, se da por seguro que Manuel Soto, del PSOE, será alcalde de Vigo. También parece que no hay duda de que El Ferrol, antaño del Caudillo, será regido por un socialista, Jaime Quintanilla, cuyo padre fue fusilado por los seguidores de Franco al poco tiempo de iniciarse la guerra civil. En La Coruña se barajan varias hipótesis sobre la decisión final de la izquierda. Unidade Galega, que ha obtenido cinco concejales y anoche esperaba conseguír todavía uno más, lo que la situaría en igualdad de condiciones con el PSOE, aspira a conseguir la alcaldía y sus dirigentes estiman ilógico que el cargo vaya a parar al PCE, que solamente cuenta con dos concejales en este municipio.

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