ELECCIONES MUNICIPALES

El Ayuntamiento de Sevilla, con graves problemas económicos

La deteriorada situación financiera del actual Ayuntamiento de Sevilla vuelve a poner en peligro la prestación de un servicio funda mental para los ciudadanos. Se trata, en esta ocasión, de la limpieza de los colegios nacionales de la capital, cuya continuidad está amenazada por el incumplimiento por parte de la Corporación de sus obligaciones contractuales.El Ayuntamiento adeuda 46 millones de pesetas (pronto habrá que sumar los correspondientes a marzo) a la empresa El Sol, concesionaria de las labores de limpieza en las escuelas sevillanas, y sólo tiene disponible menos de la cuarta parte d...

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La deteriorada situación financiera del actual Ayuntamiento de Sevilla vuelve a poner en peligro la prestación de un servicio funda mental para los ciudadanos. Se trata, en esta ocasión, de la limpieza de los colegios nacionales de la capital, cuya continuidad está amenazada por el incumplimiento por parte de la Corporación de sus obligaciones contractuales.El Ayuntamiento adeuda 46 millones de pesetas (pronto habrá que sumar los correspondientes a marzo) a la empresa El Sol, concesionaria de las labores de limpieza en las escuelas sevillanas, y sólo tiene disponible menos de la cuarta parte de dicha cifra. La dirección de la empresa exige al menos la mitad para hacer frente a las pagas de marzo y extraordinaria de primavera. Las trescientas limpiadoras que forman la plantillí han expresado, por su parte, su decisión de no renunciar ni posponer el cobro de sus retribuciones.

En otro orden de cosas, numerosos policías municipales sevillanos han dirigido instancias al alcalde de la ciudad solicitando que se aplace hasta la renovación del Ayuntamiento el concurso-oposición convocado para cubrir ocho plazas vacantes de cabo de la citada institución.

Los firmantes del escrito consideran que no existe perentoriedad ninguna para cubrir estas vacantes, y que debe ser la nueva Corporación la que controle tanto las bases reguladoras como el desarrollo del concurso. «Se evitaría de esta forma -añaden- que sobre los miembros de la actual Corporación pudiera recaer la sospecha de precipitación y de secuestro de decisiones al primer Ayuntamiento democrático que se elegirá en nuestra ciudad. »

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