Hassan II: "El problema del Sahara lo resolverá el tiempo"

«El contencioso del Sahara occidental es uno de esos problemas para cuya solución el factor tiempo cuenta de una manera considerable»; declaró ayer el rey de Marruecos, Hassan II, al final de un almuerzo que le había ofrecido el presidente francés.

El soberano marroquí terminará hoy su estancia privada en un castillo ubicado a cincuenta kilómetros de París. Anteanoche, cenó en privado con el presidente francés y, según buenas fuentes, la cuestión del Sahara occidental ocupó lo más importante de su diálogo.Por la tarde, anteayer, el presidente galo había estimado que «hay soluciones posi...

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«El contencioso del Sahara occidental es uno de esos problemas para cuya solución el factor tiempo cuenta de una manera considerable»; declaró ayer el rey de Marruecos, Hassan II, al final de un almuerzo que le había ofrecido el presidente francés.

El soberano marroquí terminará hoy su estancia privada en un castillo ubicado a cincuenta kilómetros de París. Anteanoche, cenó en privado con el presidente francés y, según buenas fuentes, la cuestión del Sahara occidental ocupó lo más importante de su diálogo.Por la tarde, anteayer, el presidente galo había estimado que «hay soluciones posibles» para resolver la cuestión del Sahara. Oficiosamente se dijo ayer en París que los dos hombres «puede pensarse que examinaron las diferentes soluciones posibles».

El señor Giscard había dicho, en la rueda de prensa del sábado que no deseaba mediar entre Marruecos, Argelia y Mauritania, pero los observadores franceses no ocultan que «Giscard quiere presentar a las tres partes sus sugerencias». Tras haber estudiado el problema con el presidente mauritano y con el rey de Marruecos, según afirmó ayer una fuente árabe en París, «Giscard y el nuevo presidente de Argelia se entrevistarán en un plazo más o menos breve».

Hassan II se encuentra en París desde el miércoles en visita privada. En lugar de alojarse en un céntrico hotel de la plaza de la Concordia, como es su costumbre, reside en un castillo de su propiedad, en las afueras de París.

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