El IRA ataca depósitos de combustible en Londres

El IRA ha vuelto a atacar Londres; esta vez eligiendo blancos mucho más peligrosos. Dos bombas hicieron explosión en la madrugada del jueves en la periferia de la capital británica. La primera fue colocada junto a un gran tanque de queroseno de la compañía Texaco. La segunda voló un gasómetro y provocó un incendio visible desde kilómetros. En una llamada telefónica previa a los estallidos, el IRA provisional pidió el desalojo de las zonas de peligro y anunció que otros diecisiete explosivos habían sido colocados en diferentes lugares.

Horas antes, la policía había desactivado una bomba ...

El IRA ha vuelto a atacar Londres; esta vez eligiendo blancos mucho más peligrosos. Dos bombas hicieron explosión en la madrugada del jueves en la periferia de la capital británica. La primera fue colocada junto a un gran tanque de queroseno de la compañía Texaco. La segunda voló un gasómetro y provocó un incendio visible desde kilómetros. En una llamada telefónica previa a los estallidos, el IRA provisional pidió el desalojo de las zonas de peligro y anunció que otros diecisiete explosivos habían sido colocados en diferentes lugares.

Horas antes, la policía había desactivado una bomba colocada en una de las autopistas de salida de Londres y cerrado al tránsito el principal túnel que atraviesa el Támesis, donde se suponía que había sido plantada otra carga. El incendio que siguió a la voladura del gasómetro de Greenwich era combatido por más de cien bomberos horas después del sabotaje. Centenares de personas fueron evacuadas de sus hogares y el trabajo nocturno fue interrumpido en las fábricas colindantes. Tanto la explosión de Greenwich como la del depósito de Texaco, en Canvey Island, fueron provocadas con cargas incendiarias de entre cinco y diez kilos de explosivos.El jefe de la brigada antiterrorista de Scotland Yard, plenamente movilizada desde ayer, ha descartado que los sabotajes pueden ser una represalia por la detención el miércoles de cuatro irlandeses en conexión con los atentados por bomba que sufrió la capital británica en diciembre. Según el superintendente Peter Duffy, las nuevas acciones de los provisionales han debido ser planeadas con sumo cuidado, y su envergadura potencial sugiere que el IRA se ha decidido por nuevos y más alarmantes objetivos y que cuenta con una infraestructura en Inglaterra que le permite un margen de movilidad considerable.