Cartas al director

Caos en Correos

Lector habitual desde el primer día del diario de su digna dirección, me permito adjuntarle fotocopia del sobre de una carta, cuyo estampillado en Barcelona es de fecha 22 de diciembre, y cuya carta, con sello de urgencia ha llegado a mi casa hoy, 28 de diciembre de 1978, a las 11.25.Seis fechas de Barcelona a Madrid, y con franqueo urgente, ¡ya está bien!

Señalo además, aprovechando la circunstancia, que una carta mía cursada el día 4 de este mes de diciembre, con destino a Barcelona, no ha llegado -ayer, día 27, por lo menos- a su destino, según se me dice por conferencia telef...

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Lector habitual desde el primer día del diario de su digna dirección, me permito adjuntarle fotocopia del sobre de una carta, cuyo estampillado en Barcelona es de fecha 22 de diciembre, y cuya carta, con sello de urgencia ha llegado a mi casa hoy, 28 de diciembre de 1978, a las 11.25.Seis fechas de Barcelona a Madrid, y con franqueo urgente, ¡ya está bien!

Señalo además, aprovechando la circunstancia, que una carta mía cursada el día 4 de este mes de diciembre, con destino a Barcelona, no ha llegado -ayer, día 27, por lo menos- a su destino, según se me dice por conferencia telefónica.

Y lo único que se me ocurre es pensar que cuando uno contrata un servicio y lo paga por adelantado, y luego dicho servicio no se realiza, la cosa tiene un nombre, cuyo nombre le cuadra al responsable del incumplimiento, sea particular, sea -como en este caso- un servicio público. ¿Estafa? ¿Abuso de confianza? ¿Ambos? Una auténtica vergüenza para un país que presume de civilizado.

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Quiero señalar, además, que cuando se trató de cobrar el aguinaldo navideño los carteros no se retrasaron ni un solo día.

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