Suárez tendría que negociar la investidura con el PNV o el Grupo Mixto

El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, sólo se sentiría inclinado a la votación de investidura si tuviera previamente asegurada la mayoría absoluta del Congreso. Según fuentes solventes, «no le gusta la mayoría simple». De acuerdo con el sondeo realizado por EL PAIS, entre los grupos y diputados dudosos, de los 176 votos necesarios, cuenta con 174, sumando los 159 de UCD, ocho de la Minoría Catalana (excepción hecha del señor Barrera) y siete de los trece diputados del Grupo Mixto. Para obtener los dos que le faltan o asegurarse una mayoría más holgada, Suárez necesita negociar con el PNV ...

El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, sólo se sentiría inclinado a la votación de investidura si tuviera previamente asegurada la mayoría absoluta del Congreso. Según fuentes solventes, «no le gusta la mayoría simple». De acuerdo con el sondeo realizado por EL PAIS, entre los grupos y diputados dudosos, de los 176 votos necesarios, cuenta con 174, sumando los 159 de UCD, ocho de la Minoría Catalana (excepción hecha del señor Barrera) y siete de los trece diputados del Grupo Mixto. Para obtener los dos que le faltan o asegurarse una mayoría más holgada, Suárez necesita negociar con el PNV o el Grupo Mixto.

En el caso de que Adolfo Suárez no opte por la disolución de una o ambas Cámaras, con la consiguiente convocatoria de elecciones legislativas -segunda de las posibilidades que se abren al presidente del Gobierno durante treinta días a partir de la promulgación de la Constitución-, lo que se producirá, en aplicación del artículo 99, será la votación de investidura. Para dar paso a esta opción, la disposición transitoria octava de la Constitución exige que el presidente dimita.Al margen de las especulaciones políticas que la situación estrictamente legal abre a partir de la dimisión del presidente Suárez -con base en las consultas previas que deberá mantener el Rey «con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria»-, no existen dudas verosímiles sobre la persona del candidato que propondrá don Juan Carlos al Congreso. Sobre la gran probabilidad de que sea Adolfo Suárez, las interrogantes que se plantean se refieren a las facilidades o dificultades para obtener la confianza y a si, en caso de lograrla, será por mayoría absoluta o por mayoría simple, en una segunda votación, 48 horas después de la primera.

La mayoría absoluta exige, como se sabe, el voto afirmativo de la mitad más uno de los miembros de la Cámara, es decir, en el caso del Congreso de los Diputados, que cuenta con 350 miembros, 176 votos positivos. En la actualidad, el grupo parlamentario de Unión de Centro Democrático cuenta con 159 miembros, que, salvo imprevistos, parece lógico pensar que digan sí a la continuidad de Suárez. ¿Dónde podrá hallar Suárez los diecisiete votos que le faltan para construir esa mayoría absoluta?

A través de sus corresponsales en provincias y de su redacción en Madrid, EL PAIS ha compulsado las opiniones de los diferentes grupos parlamentarios y de los diputados que individualmente pudieran contribuir a formar esa mayoría, y las ofrece hoy, a salvo siempre de los cambios de actitud que puedan producirse. A nivel de grupos, los Socialistas del Congreso y los Socialistas de Cataluña (107 y dieciocho votos, respectivamente), no votarán afirmativamente la investidura de Suárez y sólo podrían, si no votan en contra, abstenerse. El grupo Comunista y Alianza Popular tampoco piensan votar afirmativamente en principio, aunque el primero de ellos estaría dispuesto a colaborar mediante la abstención.

Así pues, las zonas parlamentarias de donde Suárez puede extraer votos se encuentran en el Grupo Mixto (trece diputados), la Minoría Catalana (nueve diputados) y el PNY (ocho diputados), en total treinta votos, de los que Adolfo Suárez necesita diecisiete. El PNV, cuantas veces ha, sido requerido por EL PAIS para pronunciarse sobre el tema ha preferido no anticipar su actitud.

La Minoría Catalana, previa condición de que Suárez no disuelva las actuales Cortes «por lo menos en un año, sean cuales sean las circunstancias polítícas.», daría su sí a Adolfo Suárez. Pero no deben contabilizarse nueve votos, sino sólo ocho, porque Heribert Barrera declaró a este periódico: «Considero muy necesarias las elecciones y consecuentemente votaré en contra si el presidente Suárez pide al Congreso la investidura.»

De los trece diputados del Grupo Mixto son seguros los tres enviados de UCD (Luis Gamir, José Ramón Pin y Juan Antonio González); Carlos Güell de Sentmenat («Me siento plenamente identificado con los planteamientos políticos del grupo que representa el presidente Suárez», nos dijo); Raúl Morodo (recientemente nombrado embajador extraordinario en Africa); Francisco de Paula Burguera (por entender que las elecciones sólo interesan a UCD y PSOE), y Pedro Morales (partidario de que Suárez continúe, aunque «con un nuevo Gobierno»).