Fuertes quejas de los alumnos del INEF

Un grupo de veintiocho alumnos del Instituto Nacional de Educación Física (INEF) ha redactado y firníado una carta en la que se expresa la queja por la forma en que dicho instituto es tratado por Benito Castejón, director del Consejo de Deportes (CSD). El punto más importante de la queja se centra en la decisión del CSID de suprimir a los alumnos del INEF la subvención para las comidas.Los alumnos se quejan en su carta de que Castejón forzara a José María Cagigal, director del INEF desde su fundación, a que dimitiese de su cargo, para después someter al instituto a un pemicioso abandono; señal...

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Un grupo de veintiocho alumnos del Instituto Nacional de Educación Física (INEF) ha redactado y firníado una carta en la que se expresa la queja por la forma en que dicho instituto es tratado por Benito Castejón, director del Consejo de Deportes (CSD). El punto más importante de la queja se centra en la decisión del CSID de suprimir a los alumnos del INEF la subvención para las comidas.Los alumnos se quejan en su carta de que Castejón forzara a José María Cagigal, director del INEF desde su fundación, a que dimitiese de su cargo, para después someter al instituto a un pemicioso abandono; señalan que se ha reducido la plantilla de ordenanzas y de personal subalterno, hasta el punto de que no existen ya los servicios de limpieza más imprescindibles; exponen que en el INEF se corta la calefacción a las tres, mientras que en el CSID queda encendida todo el día; y hacen hincapié en el problema que para ellos supone la supresión de la subvención para las comidas, que existe para los estudiantes de todas las facultades de la Complutense.

En su carta, los alumnos hacen algunas acusaciones, e indican a Castejón que hay otras formas de comenzar las economías antes que suprimir dicha subvención. Se quejan, por ejemplo, de los muchos funcionarios del CSD que «van por la mañana y a la media hora descienden en el ascensor hasta el garaje y se marchan a otras muy distintas ocupaciones», o de las secretarias que «con el pretexto de salir a desayunar cogen sus utilitarios y se van al mercado de Altamirano, donde se las puede ver haciendo la compra de sus casas».

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