Los presidentes de la Generalidad no serán diputados vitalicios del Parlamento

La comisión de los veinte, que redacta el anteproyecto de Estatuto de Autonomía para Cataluña, rechazó en su sesión de ayer la propuesta de que en el capítulo tercero relativo a la composición del Parlamento catalán se incluya en el futuro Estatuto que los presidentes de la Generalidad sean diputados vitalicios de dicho Parlamento.

La propuesta fue presentada por el diputado de Alianza Popular (AP) Laureano López Rodó y tuvo el solo voto a favor del diputado Joaquín Arana, de Esquerra Republicana de Cataluña, partido que se distingue por su apoyo incondicional a Tarradellas. Se abstuvie...

La comisión de los veinte, que redacta el anteproyecto de Estatuto de Autonomía para Cataluña, rechazó en su sesión de ayer la propuesta de que en el capítulo tercero relativo a la composición del Parlamento catalán se incluya en el futuro Estatuto que los presidentes de la Generalidad sean diputados vitalicios de dicho Parlamento.

La propuesta fue presentada por el diputado de Alianza Popular (AP) Laureano López Rodó y tuvo el solo voto a favor del diputado Joaquín Arana, de Esquerra Republicana de Cataluña, partido que se distingue por su apoyo incondicional a Tarradellas. Se abstuvieron en la votación UCD y UCC. También se abstuvo CDC, aunque por motivos distintos, ya que el partido de Jordi Pujol es partidario de simplificar al máximo este título del Estatuto en base a su creencia de que debe ser el primer Parlamento catalán elegido el que debe regular la futura composición y funciones del máximo órgano representativo de Cataluña.Toda la sesión de ayer de la comisión de los veinte estuvo dirigida a terminar la lectura del borrador de Estatuto ya revelado por EL PAÍS. En general, puede decirse que esta segunda lectura no ha modificado sustancialmente el texto ya conocido. Las modificaciones que en él se han dado son simplemente de reorganización de los apartados y de la numeración de los artículos o en su caso, de mejora o añadido de párrafos debido a los cambios que en las últimas semanas registró el texto de la Constitución española.

En este sentido hay que señalar que ha habido mejoras sustanciales en el tema de las competencias de orden público. Así, el Estatuto contempla que la Generalidad podrá crear una policía propia en el marco de una futura ley, orgánica del Estado y se añaden dilposiciones transitorias en las que una junta de seguridad pública, dependiente de la Generalidad, tendrá competencias en la ejecución de las funciones de policía y orden interior de Cataluña, incluido el nombramiento y separación de personal y coordinación con los servicios policiales del Estado.

La comisión de los veinte entrará hoy en la discusión del capítulo relativo a Finanzas y de las disposiciones transitorias que regularán las primeras elecciones al Parlamento catalán.

A este respecto hay que señalar, según manifestó a EL PAÍS uno de los miembros de la comisión, que «Cataluña tendrá cinco circunscripciones electorales, es decir, las cuatro provincias electorales y una quinta configurada por Barcelona». Esta configuración será aceptada, según la fuente, por Convergencia Democrática de Cataluña, comunistas y socialistas, de acuerdo todos ellos en que las normativas de las primeras elecciones al Parlamento catalán no deben variar las coordenadas que hacen previsible un resultado similar a las pasadas elecciones del 15 de junio.

Hoy, presentación

El texto completo del anteproyecto de Estatuto será dado a conocer a últimas horas de la tarde de hoy, cuando la comisión finalice sus trabajos.A modo de resumen general hay que señalar que el texto surgido de las sesiones de este fin de semana puede ser parcialmente modificado cuando la comisión de los veinte, en sesión pública, vuelva a debatir todo el articulado. El mayor número de votos particulares presentados al texto lo ostenta AP. Le siguen UCD y UCC, partidos que han anunciado que mantendrán la enmienda para que el Parlamento catalán contemple dos Cámaras pese a que reconocen que la correlación de fuerzas en la Asamblea de Parlamentarios -una clara mayoría de izquierdas- les es adversa.

Por otra parte, hay que añadir que pese a las dificultades que los parlamentarios de izquierda ponen a Tarradellas para que pueda presentarse de nuevo a la presidencia de la Generalidad, es evidente que entre estos parlamentarios subsisten los temores de que Tarradellas intente retrasar el Estatuto, y con ello prolongar su mandato personal.