Rigor con los empresarios
La noticia publicada en primera plana de su periódico el 25-10-78, referente a la petición fiscal de catorce años de prisión para un industrial catalán, por impago de la cuota de la Seguridad Social y del IRTP ha debido inquietar profundamente a una gran masa de empresarios de nuestro país.Quiero aprovechar, señor director para hacer públicamente estas reflexiones:
Las empresas que no se han hundido y que continúan actuando en virtud de la ley de la selección natural es que son fenomenales y los empresarios, fuera de serie. No dudo que muchas habrán obtenido facillidades públicas y cred...
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La noticia publicada en primera plana de su periódico el 25-10-78, referente a la petición fiscal de catorce años de prisión para un industrial catalán, por impago de la cuota de la Seguridad Social y del IRTP ha debido inquietar profundamente a una gran masa de empresarios de nuestro país.Quiero aprovechar, señor director para hacer públicamente estas reflexiones:
Las empresas que no se han hundido y que continúan actuando en virtud de la ley de la selección natural es que son fenomenales y los empresarios, fuera de serie. No dudo que muchas habrán obtenido facillidades públicas y crediticias pero muchísimas más no las han tenido y se debaten con el agua al nivel de la boca y justo con las narices fuera para respirar pero siguiendo con el simil, les están tirando de las piernas una Seguridad Social que es un peso terrible, unos impuestos duros y para colmo, sin poder remodelar su empresa y adaptarla a las nuevas características económicas del mercado, que ellos no han provocado, dada la escasísima flexibilidad que pueden dar a sus plantillas.
Si a este tipo de empresario, que, además ,en muchísimos casos, se le adeudan cantidades importantísimas. incluso por entidades oficiales y empresas paraestatales y se les niegan descuentos y créditos por la banca y, por otro lado se les amenaza con la cárcel por retrasos en los pagos de la Seguridad Social y de impuestos (aunque sean cantidades retenidas), creemos que no vamos a encontrar empresarios ni buscándolos con lupa, y habrá de calificarlos de héroes..., a la fuerza.
Estas empresas están sosteniendo sobre sus espaldas, las que sobreviven, un paro tremendo; una desorganización y despilfarro de la Seguridad Social impresionante, hasta el punto que se puede demostrar que con lo que pagan muchas empresas a la Seguridad Social podrían tener el mejor cuadro médico del país.