Nuevos enfrentamientos en la zona de la reforma agraria portuguesa

Carlos Mota Pinto inicia los contactos para la formación del futuro Gobierno en medio de un clima de creciente agitación social, en particular en torno de la cuestión de la reforma agraria.La impresión que prevalece en Lisboa es que la constitución del nuevo ejecutivo podrá ser relativamente rápida.

Todo indica que por su composición el Gobierno Mota Pinto no diferirá mucho del anterior. La representación de los partidos se prevé más bien «simbólica», es decir, reducida a personalidades de segunda categoría, escogidas por su competencia y no por su representatividad. La participación de...

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Carlos Mota Pinto inicia los contactos para la formación del futuro Gobierno en medio de un clima de creciente agitación social, en particular en torno de la cuestión de la reforma agraria.La impresión que prevalece en Lisboa es que la constitución del nuevo ejecutivo podrá ser relativamente rápida.

Todo indica que por su composición el Gobierno Mota Pinto no diferirá mucho del anterior. La representación de los partidos se prevé más bien «simbólica», es decir, reducida a personalidades de segunda categoría, escogidas por su competencia y no por su representatividad. La participación de «disidentes» socialistas, como Medeiros Ferreira o Antonio Barreto parece descartada. El Partido Socialista ya sugirió que interpretaría esas incorporaciones como un acto de hostilidad. Tampoco el ala izquierda del Partido Social Demócrata (PSD) parece muy interesada en asumir responsabilidades que puedan agravar de nuevo las divergencias internas. Mota Pinto deberá, pues, volverse hacia los «independientes ». Un diario derechista de Lisboa afirma que también la mayoría de los ministros de Nobre da Costa se negarán a formar parte del nuevo elenco «para no hacer el juego a los políticos».

La creciente agitación social que se registra en el país puede acelerar el fin de la crisis. El Ministerio de Agricultura, que ha recibido todo el apoyo del presidente Eanes para adoptar una actitud de firmeza en el asunto de la reprivatización de tierras, se había comprometido a no hacer más uso de la fuerza, pero dos de las cinco acciones de devolución de propiedades programadas para el jueves pasado no han podido ejecutarse porque los representantes de las unidades colectivas de producción afectadas se negaron a Firmar el acto de entrega.

Los funcionarios del Ministerio de Agricultura se presentaron de nuevo ayer en el lugar con el dispositivo policial que en otras ocasiones originó incidentes. La presencia de efectivos de la Guardia Republicana, con carros blindados y perros policías, provocó enfrentamientos en los que resultaron heridos varios trabajadores rurales.

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