Paro en Antibióticos, SA

Seiscientos trabajadores de Antibióticos, SA, fueron ayer a la huelga en demanda de mejoras salariales y del cumplimiento, por parte de la empresa, de la normativa legal sobre seguridad e higiene en el trabajo. Este último punto llevaba negociándose casi dos años sin acuerdo alguno entre la empresa y las centrales sindicales Comisiones Obreras, UGT y Sindicato Independiente, de los que partió la convocatoria de la huelga. En el apartado de mejoras salariales los trabajadores piden un aumento lineal de 5.000 pesetas.

Las negociaciones entre la empresa y centrales sindicales quedaron ...

Seiscientos trabajadores de Antibióticos, SA, fueron ayer a la huelga en demanda de mejoras salariales y del cumplimiento, por parte de la empresa, de la normativa legal sobre seguridad e higiene en el trabajo. Este último punto llevaba negociándose casi dos años sin acuerdo alguno entre la empresa y las centrales sindicales Comisiones Obreras, UGT y Sindicato Independiente, de los que partió la convocatoria de la huelga. En el apartado de mejoras salariales los trabajadores piden un aumento lineal de 5.000 pesetas.

Las negociaciones entre la empresa y centrales sindicales quedaron rotas la pasada semana al negarse la primera a aceptar aumentos lineales, proponiendo, por su parte, que dichas mejoras se distribuyeran de forma proporcional a los salarios actuales, lo que dio lugar a la huelga.

Ayer sólo trabajaron los servicios de mantenimiento de la fábrica y algunos equipos de producción indispensables. A las once de la mañana tuvo lugar una asamblea de los trabajadores en la que se decidió prolongar la huelga por tiempo indefinido, en espera de nuevas negociaciones y de una nueva asamblea que tendrá lugar hoy a la misma hora. Se da la circunstancia de que días atrás estuvo a punto de llegarse a un acuerdo entre empresa y trabajadores, antes de que la Fele -Federación Leonesa de Empresarios, integrada en la CEOE- anunciara públicamente su propósito de no negociar ningún convenio colectivo en tanto no finalicen las «jornadas de reflexión», cuyos acuerdos deben sustituir a los pactos de la Moncloa.