Mercasa replantea su política comercial de cara al futuro

La Empresa Nacional Mercasa, cuya pérdida real acumulada en 1976 ascendió a quinientos millones de pesetas, finalizará el presente ejercicio con un resultado cero e, incluso, con un ligero superávit, ha afirmado Carlos Cortés, presidente de esta entidad, en una reunión con los periodistas. El motivo de esta reunión ha sido informar sobre el replanteamiento de la política de Mercasa para el futuro, en cuanto a las funciones social y comercial que debe cumplir esta empresa nacional y a su gestión económica.Carlos Cortés analizó los resultados obtenidos en los doce años de funcionamiento de la em...

La Empresa Nacional Mercasa, cuya pérdida real acumulada en 1976 ascendió a quinientos millones de pesetas, finalizará el presente ejercicio con un resultado cero e, incluso, con un ligero superávit, ha afirmado Carlos Cortés, presidente de esta entidad, en una reunión con los periodistas. El motivo de esta reunión ha sido informar sobre el replanteamiento de la política de Mercasa para el futuro, en cuanto a las funciones social y comercial que debe cumplir esta empresa nacional y a su gestión económica.Carlos Cortés analizó los resultados obtenidos en los doce años de funcionamiento de la empresa nacional, que cuenta en estos momentos con trece unidades alimentarias terminadas, Mercairuna, a punto de entrar en actividad y otras cinco en construcción: Mercamadrid, Mercacaso y las de Las Palmas, Tenerife y Málaga, lo que hace un total de diecinueve en las principales zonas de consumo del territorio nacional.

Ha habido, sin embargo, dos fallos radicales, según el presidente de Mercasa: los beneficiados de la mejora de las infraestructuras y de la inversión de Mercasa han sido, casi exclusivamente, los mayoristas, sin que haya alcanzado a los productores ni a los consumidores. Por otra parte, las explotaciones han tenido una tónica deficitaria, «que no tiene razón de ser».

El nuevo enfoque de la política de Mercasa está encaminado a poner esa infraestructura al servicio de todos los destinatarios: los productores, los detallistas y los consumidores.

El cauce que se piensa seguir es parecido en los tres sectores productivos: frutas y hortalizas, pescado y carne. Se crearán unos canales alternativos de comercialización mediante la constitución de sociedades anónimas de productores en distintas zonas del país y se promoverá la creación de asociaciones de minoristas que, por medio de centrales de compras, se relacionen directamente con dichas sociedades utilizando las instalaciones y servicios de la red Mercasa.

No hay muestras de oposición, hasta el momento, por parte de las organizaciones de mayoristas de frutas y hortalizas y carnes respecto a estos canales alternativos, aunque sí se observa contrariedad entre los grandes exportadores y asentadores de pescado.

Respecto a la proyección en la reducción de precios a los consumidores, existen proyectos de creación de hipermercados próximos a los mercas.