Acceso al crédito

«En los países más avanzados en legislación social -también en los más desarrollados económicamente dentro de un sistema de libre empresa- la posibilidad de acceso al crédito de grandes y pequeños empresarios es casi simultánea a la creación de las sociedades, y el crédito personal es casi consustancial a la persona humana. La deseable socialización del crédito, sin embargo, en su doble vertiente hacia la inversión y hacia el consumo, nada tiene que ver con una beneficencia financiera ni con una diversificación de esfuerzos y riesgos que esterilizaría las posibilidades de desarrollo económico ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

«En los países más avanzados en legislación social -también en los más desarrollados económicamente dentro de un sistema de libre empresa- la posibilidad de acceso al crédito de grandes y pequeños empresarios es casi simultánea a la creación de las sociedades, y el crédito personal es casi consustancial a la persona humana. La deseable socialización del crédito, sin embargo, en su doble vertiente hacia la inversión y hacia el consumo, nada tiene que ver con una beneficencia financiera ni con una diversificación de esfuerzos y riesgos que esterilizaría las posibilidades de desarrollo económico a nivel nacional, en aras de una promoción a nivel personal o sectorial. Un crédito «socializado», por el contrario, debería regirse por los ineludibles principios de rentabilidad económica, justicia distributiva y capacidad de generar estímulos y resultados positivos. , 20 junio

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En