El fiscal de Vitoria pide cuatro penas de muerte
En un plazo no superior a dos meses se espera que sea visto en la Audiencia Provincial de Vitoria el juicio contra los presuntos autores del asesinato de un taxista de Bilbao y un vecino de Deusto (Vizcaya), que fallecieron por heridas de arma blanca uno de ellos, y al serle clavado un destornillador en el pecho el otro. Los hechos ocurrieron el día 20 de abril de 1977, y han sido instruidos por el juzgado de Amurrio.
El fiscal de la Audiencia de Alava ha solicitado doble pena de muerte para José García Moral -una por cada uno de los delitos de robo con homicidio- y cinco años de pr...
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En un plazo no superior a dos meses se espera que sea visto en la Audiencia Provincial de Vitoria el juicio contra los presuntos autores del asesinato de un taxista de Bilbao y un vecino de Deusto (Vizcaya), que fallecieron por heridas de arma blanca uno de ellos, y al serle clavado un destornillador en el pecho el otro. Los hechos ocurrieron el día 20 de abril de 1977, y han sido instruidos por el juzgado de Amurrio.
El fiscal de la Audiencia de Alava ha solicitado doble pena de muerte para José García Moral -una por cada uno de los delitos de robo con homicidio- y cinco años de presidio menor por el delito de robo para su compañero, Jesús Suárez Gende. También ha pedido el fiscal otras dos penas, cada una de dieciocho años de reclusión, por cada delito de robo con homicidio, cinco meses de arresto mayor por robo, y 10.000 pesetas de multa por conducción ilegal. Los dos procesados deberán indemnizar a los familiares de las víctimas con tres millones de pesetas en conjunto.
El día de autos, 20 de abril del año pasado, según la acusación, los procesados asaltaron, a la salida de un bar, a Cruz Emeterio Ordeñana, con el presunto móvil de robo, conduciéndole a un bosquecillo situado en el pueblo de Llodio, donde le clavaron el destornillador. A continuación tomaron un taxi, con ánimo de asaltar al taxista, pero éste logró huir. Posteriormente, en Bilbao, los dos acusados requirieron los servicios de otro taxista, al que exigieron la recaudación, que era de 3.000 pesetas. Este no opuso resistencia a la entrega del dinero. Sin embargo, fue apuñalado en las inmediaciones de Llodio, tras lo, que sus agresores huyeron,
Según algunas referencias, se proyecta hacer una concentración de taxistas el día en que tenga lugar la vista.