Huelga de hambre en favor de la paz en Oriente Próximo

«Continuaré la huelga de hambre hasta que el Gobierno de Menahem Begin tenga en cuenta la voluntad de paz de su pueblo, hasta que se decida a cumplir sus compromisos: no llevar a cabo ninguna acción que entorpezca las negociaciones de paz. Mantendré mi ayuno voluntario hasta que no haya nuevas colonias judías en los territorios ocupados, mientras haya una posibilidad de que las conversaciones con Egipto lleguen a buen fin.»Abie Nathan, 53 años, «piloto de la paz» y la primera persona que intentó abrir un diálogo con los dirigentes egipcios, explicó con esas palabras los motivos de su huelga de...

«Continuaré la huelga de hambre hasta que el Gobierno de Menahem Begin tenga en cuenta la voluntad de paz de su pueblo, hasta que se decida a cumplir sus compromisos: no llevar a cabo ninguna acción que entorpezca las negociaciones de paz. Mantendré mi ayuno voluntario hasta que no haya nuevas colonias judías en los territorios ocupados, mientras haya una posibilidad de que las conversaciones con Egipto lleguen a buen fin.»Abie Nathan, 53 años, «piloto de la paz» y la primera persona que intentó abrir un diálogo con los dirigentes egipcios, explicó con esas palabras los motivos de su huelga de hambre.

Abie Nathan no es un frívolo. Es quizá un ingenuo, pero se trata de la ingenuidad de quienes tienen fe.

Nathan desafió las leyes de guerra de Israel y Egipto cuando, con su propio avión, aterrizó en Egipto poco antes de la guerra de 1967, con la esperanza de ser recibido por Nasser.

«Continuaré mi huelga de hambre hasta la muerte, si es necesario.» Estas palabras fueron seguidas por un largo silencio entre los periodistas que acudimos a la conferencia de prensa que convocó Nathan. «Decenas de millares de nuestros soldados están dispuestos a sacrificar su vida por nuestro país en nombre de la seguridad. ¿Por qué no voy a sacrificar la mía por la paz?», añadió.

«Había una época en la que los árabes rechazaban el diálogo con Israel. Ahora, cuando el presidente egipcio, Anuar el Sadat, ha abierto el diálogo, ¿qué ha hecho nuestro Gobierno? Si este diálogo se acaba, muere por culpa nuestra, ¿qué sentido tendría entonces nuestra vida aquí?»

EL PAIS. ¿Por qué considera que usted, solo, puede tener más influencia sobre el Gobierno que el movimiento «La paz, ahora», que ha recogido decenas de millares de firmas?

Abie Nathan. « No estoy seguro si lo conseguiré. Pero ¿qué es lo que han conseguido con esas firmas? Los partidarios de Begin han lanzado un contra-manifiesto que también

ha sido firmado por decenas de millares de firmas. Además, cada cual escoge su forma de lucha. Yo he elegido la huelga de hambre.»

EL PAIS. ¿Por qué pone su vida en peligro?

A. B. «No me desmoralice. Si le he pedido que venga aquí no ha sido para que me convenza de que interrumpa mi huelga. He escogido el arma de la no-violencia, la última arma cuando las demás han fracasado. Yo no hago esto por capricho. Usted me conoce: amo la vida, y la buena comida. Si he decidido ayunar hasta el fin, no ha sido porque tengo deseo de morir. Lo he hecho en nombre de la vida.»