Hay sanidad en Barajas
En el diario de su dirección vienen apareciendo diversos artículos con comentarios sobre El nuevo terminal internacional del aeropuerto de Barajas.
En cuando al servicio de sanidad se refiere, considero que sus colaboradores se encuentran erróneamente informados de muchas de las cosas que estos artículos reflejan.
Concretamente en EL PAIS del viernes 11 de noviembre, página 21, no existe tal falta de asistencia sanitaria, que aparece en letra gruesa, pues en el aeropuerto de Barajas se encuentra permanentemente un equipo de guardia, formado en la actualidad p...
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En el diario de su dirección vienen apareciendo diversos artículos con comentarios sobre El nuevo terminal internacional del aeropuerto de Barajas.
En cuando al servicio de sanidad se refiere, considero que sus colaboradores se encuentran erróneamente informados de muchas de las cosas que estos artículos reflejan.
Concretamente en EL PAIS del viernes 11 de noviembre, página 21, no existe tal falta de asistencia sanitaria, que aparece en letra gruesa, pues en el aeropuerto de Barajas se encuentra permanentemente un equipo de guardia, formado en la actualidad por un médico, tres ATS, dos o tres mozos de clínica (según horario), dos conductores-sanitarios de ambulancias (número ampliable en caso necesario con otros conductores del servicio de cocheras y con ambulancias disponibles).
Los dos pequeños dispensarios situados en ambos extremos del nuevo edificio a que se refiere son dos salas de asistencia y control de sanidad. Atendidas, no por dos asistentes sanitarios, como dice el artículo, sino por dos ATS acompañados varias horas por un mozo de clínica o un ordenanza-sanitario (de la Jefatura Provincial de Sanidad), dotados con todo lo necesario para una primera asistencia, incluso equipo de oxígeno.
Es verdad que la clínica central se encuentra situada a más de un kilómetro, pero disponemos de tres ambulancias en la misma puerta, para un rápido desplazamiento a cualquiera de las instalaciones del aeropuerto.
La eventualidad de asistencia a los pasajeros puede presentarse tanto en salas internacionales como nacionales; además hay que atender cualquier posible contingencia del personal de aviación civil, de otros Ministerios, compañías aéreas e incluso empresas privadas, que trabajan en el aeropuerto, así como a visitantes, acompañantes de viajeros, conductores de turismos (públicos y privados), etcétera.
En cuanto a los filtros y control de sanidad, está en vías de solución la adecuación de los mismos y agilización de los trámites para evitar a los viajeros todas las molestias posibles.
Es cierto que en el nuevo terminal la mayoría de los locales destinados a oficinas y a personal que tiene que estar de servicio muchas horas, entre ellos sanidad, se han instalado en habitaciones interiores, que si bien son de suficiente superficie, carecen de luz y ventilación directa, resultando más monótona y desagradable la permanencia en los mismos. Pero también es cierto que el edificio está recién inaugurado, que estamos en un período que pudiéramos llamar de «rodaje», que parte del mobiliario de las habitaciones está provisional, en vías de sustitución de la forma más conveniente, y que aunque muchas de sus deficiencias persistan, otras muchas espero que, actuando sobre el terreno y con la práctica diaria, se podrán ir subsanando en corto espacio de tiempo, a favor tanto de los pasajeros como de los que trabajamos en el aeropuerto.
Jefe de Sanidad Aeropuerto de Barajas