Cartas al director

Que racionen la gasolina

En estos días que han seguido a la devaluación de nuestra moneda, los surtidores de gasolina existentes en el territorio español, desde Port-Bou hasta Irún, han quedado practicaniente vacíos ante la demanda del preciado líquido por parte de los franceses fronterizos que han venido, en largas colas, a llenar los depósitos de sus coches con una gasolina española, para ellos rebajada en un 25 %.Esta gasolina cuesta a los españoles «sangre, sudor y lágrimas», inflación, paro, devaluación de nuestra moneda. detención de nuestra tasa de crecimiento, etcétera. Por ello. yo me permitiría rogar al exce...

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En estos días que han seguido a la devaluación de nuestra moneda, los surtidores de gasolina existentes en el territorio español, desde Port-Bou hasta Irún, han quedado practicaniente vacíos ante la demanda del preciado líquido por parte de los franceses fronterizos que han venido, en largas colas, a llenar los depósitos de sus coches con una gasolina española, para ellos rebajada en un 25 %.Esta gasolina cuesta a los españoles «sangre, sudor y lágrimas», inflación, paro, devaluación de nuestra moneda. detención de nuestra tasa de crecimiento, etcétera. Por ello. yo me permitiría rogar al excelentísimo señor ministro «que corresponda», que ante la realidad incuestionable ue estos hechos, se apresurase, a la mayor brevedad, proceder al inmediato racionamiento de este combustible en España. otorgando al viajero turístico. no al fronterizo, una tarjeta válida para sus vacaciones en España y a nosotros los españoles. otra. para nuestros consumos habituales. Si nuestra deterjorada balanza de pagos ha sido la causante de esta nueva y nefasta devaluación, en parte, por importaciones excesivas de «crudos», no tenemos por qué ser los españoles quienes o gastemos nosotros mismos más gasolina que la debida, dándole gusto al acelerador, o que se la regalemos a nuestros vecinos prácticamente con el 25 % de rebaja, mientras nuestros barcos son detenidos en el extranjero, por pescar en aguas Comunitarias, o a nuestras exportaciones se les pongan curiosos vetos ...

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