Compás de espera
El gran equilibrio de los últimos días se acentuó en la sesión de cierre semanal, hasta el extremo de que el índice general madrileño sólo perdía una centésima, en plan simbólico. Parece, pues, que estamos atravesando un período de calina cuya simple continuidad ya seria positivo para la trayectoria bursátil, ante el caliente período electoral que se avecina.
El equilibrio se notó desde el primer cobro por la ligera disminución de papel y el volumen de negocio escaso. También se apreciaba un cierto apoyo institucional.
Las constructoras han tenido demanda, lo que les ha permitido...
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El gran equilibrio de los últimos días se acentuó en la sesión de cierre semanal, hasta el extremo de que el índice general madrileño sólo perdía una centésima, en plan simbólico. Parece, pues, que estamos atravesando un período de calina cuya simple continuidad ya seria positivo para la trayectoria bursátil, ante el caliente período electoral que se avecina.
El equilibrio se notó desde el primer cobro por la ligera disminución de papel y el volumen de negocio escaso. También se apreciaba un cierto apoyo institucional.
Las constructoras han tenido demanda, lo que les ha permitido mejorar ligeramente sus posiciones, con Dragados en cabeza. En el departamento bancario fue grande el dominio de las repeticiones. Banesto, que el día anterior no había operado por exceso de papel. ayer hacía un esfuerzo y se permitía incluso subir tres enteros.
El equilibrio en el grupo químico fue tal que sus valores punteros, Explosivos y Petróleos, subían y bajaban en la misma cuantía (2,50%).
En siderúrgicas, si bien Hornos repetía, Tubacex y Olarra bajaban cinco puntos, arrastrando al índice parcial, que es el que más dementaba.
Al cierre de la semana seguía la indecisión y se estaba en espera de lo que podría salir del Consejo de Ministros.