Ingreso de Juan de Mata en la Academia de la Historia

El historiador Juan de Mata, catedrático de Historia Universal, Antigua y Media de la Universidad de Sevilla, durante 42 años, tornó posesión de su plaza de número en la Real Academia de la Historia, con un discurso sobre El maestro Gómez-Moreno, contado por él mismo, pronunciado el pasado domingo. El discurso fue contestado, en nombre de la Corporación, por el arabista Emilio García Gómez.Tras las iniciales palabras de elogio a su antecesor, Juan María de Navascués, el profesor De Mata se refirió al tema del discurso dedicado a su maestro Manuel Gómez-Moreno. «Es cierto que se le han d...

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El historiador Juan de Mata, catedrático de Historia Universal, Antigua y Media de la Universidad de Sevilla, durante 42 años, tornó posesión de su plaza de número en la Real Academia de la Historia, con un discurso sobre El maestro Gómez-Moreno, contado por él mismo, pronunciado el pasado domingo. El discurso fue contestado, en nombre de la Corporación, por el arabista Emilio García Gómez.Tras las iniciales palabras de elogio a su antecesor, Juan María de Navascués, el profesor De Mata se refirió al tema del discurso dedicado a su maestro Manuel Gómez-Moreno. «Es cierto que se le han dedicado ya estudios muy notables, cuya simple enumeración agotaría mi tiempo, pero no es menos cierto que todavía quedan por decir sobre él algunas cosas importantes y que su figura sigue siendo poco conocida fuera de nuestros medios académicos.»

A partir de las Memorias de Gómez-Moreno, el nuevo académico hizo un recorrido biográfico del historiador granadino, aportando como material inédito las cartas que se cruzaron los dos profesores. Comentó parte de las setenta cartas escritas por Gómez-Moreno, que ahora se publican de forma fragmentaria. «Me parece ocioso -dijo- intentar un resumen del contenido de estas cartas con las que me favoreció mi maestro. Deseo comunicarlas para conocer su personalidad, sus trabajos, sus preocupaciones y algunos de los accidentes de su vida.»

Como apéndice de su discurso figura un curriculum, inédito y autógrafo, escrito por el profesor Gómez-Moreno, en 1958.

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