Cartas al director

¿Qué pasa con Marruecos?

Nuevamente el tema de Marruecos ha saltado a la primera página de la información.De manera directa y fehaciente, sé de más de un caso como el que la prensa nos ha revelado. Las humillaciones e iniquidades a que ciudadanos españoles han sido sometidos, por autoridades marroquíes -a veces mauritanas- generalmente en la persona de pescadores nos hacen reconsiderar con atención el estado de cosas.

Es hora de que la pasividad que la Administración ha observado respecto a esta problemática, que a fin de cuentas es del país todo, cese de una vez por todas. No se oculta en la mente de nadie que...

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Nuevamente el tema de Marruecos ha saltado a la primera página de la información.De manera directa y fehaciente, sé de más de un caso como el que la prensa nos ha revelado. Las humillaciones e iniquidades a que ciudadanos españoles han sido sometidos, por autoridades marroquíes -a veces mauritanas- generalmente en la persona de pescadores nos hacen reconsiderar con atención el estado de cosas.

Es hora de que la pasividad que la Administración ha observado respecto a esta problemática, que a fin de cuentas es del país todo, cese de una vez por todas. No se oculta en la mente de nadie que desde hace varios años las autoridades marroquíes -oficiosas a veces- mantienen unas posiciones de lo más arbitrario, siempre en detrimento de nuestros intereses. No es ya el honor y la vergüenza, sino la llamada particular a la dignidad de las personas, y los acuerdos internacionales, lo que se pone en tela de juicio. Cabalmente no dudamos de las buenas intenciones del Gobierno sobre este terreno, pero es preciso que una toma de medidas, prudente, pero asimismo enérgica se lleve a efecto. Otros gobiernos, en similares circunstancias lo han hecho. A fin de cuentas es el nombre de España el que está en juego.

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