El Gobierno no desea un "sí" abrumador en el referéndum

Un anuncio de baja de precios en varios productos de la cesta de la compra parece el último intento del Gobierno- para atraer votantes -en este caso femeninos- a la convocatoria del referéndum que se celebra hoy desde las nueve de la mañana a las ocho de la tarde. La medida, al parecer, se concreta a Madrid y recuerda a la que el Gobierno de Franco puso en práctica en el referéndum de 1947, al conceder un cupo especial en el racionamiento de alimentos.En otro orden de cosas cabe destacar el problema que ha planteado la postura de numerosos miembros de la Oposición que habían sido designados p...

Un anuncio de baja de precios en varios productos de la cesta de la compra parece el último intento del Gobierno- para atraer votantes -en este caso femeninos- a la convocatoria del referéndum que se celebra hoy desde las nueve de la mañana a las ocho de la tarde. La medida, al parecer, se concreta a Madrid y recuerda a la que el Gobierno de Franco puso en práctica en el referéndum de 1947, al conceder un cupo especial en el racionamiento de alimentos.En otro orden de cosas cabe destacar el problema que ha planteado la postura de numerosos miembros de la Oposición que habían sido designados para ocupar puestos en las mesas electorales. Ayer se nos informó, desde un espacho laboralista, que al menos un centenar de personas habían presentado escritos excusándose de participar por entender que era contradictorio con su postura abstencionista mantenida expresa y públicamente. El conflicto se plantea porque la ley Electoral vigente de 1907, remite al código penal y tipifica como delito el incumplimiento de estos encargos.

Suspendida una rueda de prensa

En cuanto a resultados puede señalarse que el Instituto de la, Opinión Pública suspendió ayer una rueda de prensa convocada para facilitar los resultados de. los últimos sondeos, alegando que no había sido posible concluir los trabajos definitivos.

Pese a esto, la impresión recogida en círculos oficiales es que la participación real puede estar entre el 70 y el 80% del cuerpo electoral y que las abstenciones predominarán sobre los noes. El resultado se da por seguro que será positivo, y los mismos círculos adelantaban que no se desea en absoluto conseguir ni adulterar cifras masivas de participación y de afirmación, toda vez que un resultado semejante recordaría los dos referendums franquistas de 1947 y 1966. Ahora, a los diez años y un día del último, el Gobierno vería con agrado -siempre según esas mismas fuentes- un porcentaje de «síes» que estuviera entre el 6,5 y el 70%.

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