Un administrador eficaz

El primer emperador es el más glorioso, pero también el más inocente, con estas palabras describió Li Hsien-nien a Mao, dando a entender que el carisma no lo es todo en el funcionamiento de un país. Las directivas de Mao son la base de nuestra estrategia -afirmó en otra ocasión-, pero si ignoramos la necesidad de analizarlas podemos encontrarnos con muchas dificultades.La extrema izquierda no encontró pruebas en la Revolución Cultural contra este proletario, hijo de proletario, nacido en Hupei en 1905. No se le podía acusar de «mandarín» como infantilmente se dijo de Chu E...

El primer emperador es el más glorioso, pero también el más inocente, con estas palabras describió Li Hsien-nien a Mao, dando a entender que el carisma no lo es todo en el funcionamiento de un país. Las directivas de Mao son la base de nuestra estrategia -afirmó en otra ocasión-, pero si ignoramos la necesidad de analizarlas podemos encontrarnos con muchas dificultades.La extrema izquierda no encontró pruebas en la Revolución Cultural contra este proletario, hijo de proletario, nacido en Hupei en 1905. No se le podía acusar de «mandarín» como infantilmente se dijo de Chu En-lai, verdadero motor en la sombra de la China contemporánea, quien diría de Li que era «un dios de la fortuna para China», reconociendo en él las cualidades de un hombre programático, atento a las realidades económicas.

Moderado. administrador eficiente, Li Hsien-nien también demostró sus dotes militares como jefe guerrillero contra los japoneses en 1937. Su puesto de viceprimer ministro, que obstenta desde 1954, lo obtuvo gracias a su excelente labor económica en la reconstrucción del país en la década de 1950. Cedió su puesto de ministro de Finanzas a Teng Hsiao-ping, pero una vez que éste fue eliminado en abril pasado, Li recobró todos sus cargos, manteniendo firme su defensa pragmática contra los radicales: ¿Es un crimen conseguir prosperidad?